Hay ocasiones en que los niños presentan dificultad respiratoria y detectar la causa de tal afección suele no ser tan fácil de lograr. Después de descartar ciertas patologías como alergias, cuadros clínicos virales y demás enfermedades relacionadas con las vías respiratorias, muchos médicos se quedan en el aire o siguen buscando en las profundidades lo que puede estar al alcance de la mano flotando en la superficie.

La apnea es un fenómeno que se da en los niños que padecen de dificultad respiratoria y se caracteriza en la pausa de la respiración por breves intervalos de tiempo. Este evento suele ocurrir generalmente por las noches cuando el niño está dormido, y es una causa de preocupación para los padres.

Causas de apnea en los niños

Los factores que pueden producir apnea en los niños pueden ser varios. Se destacan los siguientes:

• Presencia de alergias de origen variado que afectan a las vías respiratorias superiores, como por ejemplo la rinitis alérgica
• Deficiencias en el sistema respiratorio, por ejemplo en los pulmones, lo cual dificulta la aspiración del aire
• Presencia de pólipos nasales o acumulación de tejidos y grasa en las paredes de la nariz
• Afecciones en adenoides
• Amigdalitis
• Desviaciones del tabique nasal
• Deformación de los huesos de la cavidad craneal que conforma las cavidades bucal y nasal
• Estrechez de la mandíbula o maxilar superior

Estas son algunas de las principales razones que causan apnea del sueño en los niños. Como se ve, el equipo médico que debe tratar a estos pacientes es bastante mixto y multidisciplinario ya que abarca diferentes áreas de la salud.

Estrechez de la mandíbula o maxilar superior

Los huesos palatinos que conforman el techo de la cavidad bucal en ocasiones no son lo suficientemente amplios y esto provoca una estrechez del maxilar superior. Esta condición puede generar diversas afecciones clínicas como la aglomeración de los dientes debido a la falta de espacio para que estos crezcan y se ubiquen en su posición normal.

También es posible que genere dificultad respiratoria y en muchos casos apnea durante el sueño. Esto es sumamente importante de destacar ya que cuando hay presencia de este síntoma clínico, el Médico debe considerar la estrechez de la mandíbula superior como un posible desencadenante por lo que es recomendable referir a su paciente a la consulta con un Odontólogo u Ortodoncista.

Expansión del maxilar superior

Para tratar esta condición y eliminar la apnea del sueño es recomendable someterse a un tratamiento de ortodoncia que produzca una ampliación de la estrechez que presenta la mandíbula superior.

La expansión del maxilar superior es un procedimiento de ortodoncia que consiste en la implantación de una abrazadera que se fija en el centro del paladar o techo de la boca y se une a las muelas de ambos lados del maxilar superior. Tiene en el centro una especie de llave que sirve para apretar dicha abrazadera.

El objetivo de este tratamiento es ejercer presión en los huesos de maxilar superior para extenderlo y ampliar el paladar. Estos huesos representan tanto el techo de la cavidad bucal como el piso de la cavidad nasal. Al existir una mayor amplitud del maxilar, habrá mayor espacio en ambas cavidades lo cual va a favorecer el ingreso del aire por las vías respiratorias hacia los pulmones.

¿A qué edad es recomendable comenzar la expansión del maxilar superior?

Si se diagnóstica que la causa de la apnea de sueño es motivada a la estrechez del maxilar superior, la recomendación es iniciar el tratamiento de expansión lo antes posible. Cuando los niños son pequeños aún no tienen completamente formados los huesos.

En el caso de los huesos palatinos, que son aquellos que conforman el paladar, estos se mantienen unidos en los primeros años de vida por medio de tejido blando cartilaginoso el cual permite que las estructuras que dependen de ellos sigan creciendo hasta alcanzar su completo desarrollo y es cuando éste finaliza que se produce la sutura natural del hueso.

Mientras menor sea el niño más eficiente será el tratamiento y menor tiempo de duración tendrá. Es necesario que posean dientes de los cuales poder fijar las abrazaderas, que pueden ser dientes de leche o permanentes. En este sentido, se considera que a partir de los tres años es posible comenzar a realizar el tratamiento de expansión del maxilar superior.

Sin embargo, los niños que mayormente acuden a la consulta tienen edades comprendidas entre los 10 a los 12 años.

Complicaciones clínicas

Existen casos en los que los huesos palatinos se sellan de manera anticipada y es por esto que ocurren condiciones clínicas como la estrechez del maxilar. En estos casos el tratamiento es más aparatoso. Existen ortodoncistas especialistas que someten al paciente a un tratamiento en el cual las presiones son mayores con el objetivo de separar estos huesos. El costo en tiempo y dolor es mucho mayor por lo que no todos los odontólogos aprueban este procedimiento.

Del mismo modo, la aplicación de los tratamientos de expansión del maxilar superior tiene en ocasiones la consecuencia de que el niño tenga que usar brackets correctores posteriormente.