Al igual que médicos, abogados y casi todos los profesionistas, los dentistas también tienen especialidades que cursan después de terminar su carrera universitaria. Es decir, son estudios de postgrado en los que adquieren conocimientos más detallados en relación a áreas específicas de la odontología. Esto los acredita para la aplicación de técnicas especializadas de diagnóstico, quirúrgicas, terapéuticas, etc., al igual que sucede por ejemplo en la medicina.

Aunque todos los dentistas tienen nociones sobre todos los campos de la odontología, ellos mismos se inclinan por una o varias especialidades por lo que cuando tienen un paciente que requiera algún tratamiento específico, si ellos mismos no tienen esa especialidad, entonces lo remiten con el médico indicado.

Un mito con el que nos encontramos con mucha frecuencia es que un especialista lo es solamente para tener motivos para cobrar más caro. Esto puede ser una postura equivocada ya que para llegar a ostentar el grado de especialista ha requerido prolongar sus estudios, adquirir instalaciones, equipo y experiencia. Realizar su labor también implica una gran responsabilidad.

Por supuesto el ostentar un certificado de especialización no garantiza que el trabajo sea realizado con calidad por lo que al igual que cuando se escoge un médico o lo que se requiera, se recomienda que sea alguien bien recomendado y reconocido ante las cámaras, colegios y/o asociaciones de dicha profesión en la localidad.

Generalmente es nuestro dentista de confianza quien nos puede ofrecer algunas opciones en caso necesario, lo cual puede ser lo más indicado ya que generalmente en ambos conocen la manera de trabajar de uno y otro y coordinarse de la mejor manera y para nuestro beneficio.

Aquí te ofrecemos una pequeña descripción de algunas de las especialidades en odontología para que en caso de que tu dentista considere que requieres de algún tratamiento específico tengas una noción de lo que puede tratarse.

Ortodoncia. Dentro de esta especialidad se trata de la corrección en la posición de huesos y dientes para lograr una correcta funcionalidad en la mordida. Esto además contribuye a una mejor salud bucal y bienestar general ya que los dientes mal posicionados pueden acarrear otros problemas que van desde dificultades de aseo, de dicción, desgaste en las articulaciones de los maxilares, cefaleas, problemas de oído, equilibrio, hombros, espalda, etc. Además unos dientes mal alineados influyen también en nuestra imagen.

Endodoncia. Se requiere esta especialidad para realizar el procedimiento del mismo nombre y que consiste en la extracción de la pulpa dental. En los dientes permanentes esto involucra nervio, arteria y vena. En los dientes temporales es un poco diferente.

Esto se efectúa cuando hay lesiones profundas en piezas fracturadas o con caries y donde una restauración con resina ya no es suficiente. El endodoncista termina su trabajo sellando el conducto por donde se realizó la endodoncia y el paciente regresa con su dentista para que sea él quien termine la restauración.

Periodoncia. En esta especialidad médico-quirúrgica se estudia la prevención y el tratamiento de enfermedades u otras condiciones que afectan las encías, sobre todo en lo relacionado al soporte que se ofrece a los dientes mediante los huesos alveolares, ligamentos periodontales, etc.

Otras especialidades odontológicas son la odontopediatría (niños), cirugía maxilofacial y oral, implantología, prótesis maxilofacial.