Muchas personas piensan que es irrelevante cepillar los dientes de su perro sobre todo si ingieren comida seca (perrarina), pero de igual forma la placa bacteriana se acumula sobre y entre las piezas dentales; en el peor de los casos la placa bacteriana podría convertirse en una nueva formación conocida como “sarro” y por último pasar a ser cálculos marrones, la única forma de eliminarlos sería con una limpieza dental profesional que no es saludable realizarla con frecuencia en perros sin mencionar los costos elevados.
¿Cómo evitar los problemas bucodentales anteriores? Es sencillo sólo debes cepillar los dientes de tu perro con frecuencia (diariamente), en realidad estos son el modelo animal perfecto para desarrollar enfermedades en las encías al igual que los humanos, cuando obviamos este hecho y hacemos a un lado su higiene bucal la infección se propaga rápidamente e incluso en algunos casos llega hasta el hueso necesitando tratamientos especiales como por ejemplo: rayos láser, implantes dentales y cirugías en el tejido de las encías entre otros procedimientos sumamente invasivos, costosos y dolorosos.
Los perros tienen predilección por enfermedades en las encías como la gingivitis y periodontitis severa, curiosamente las causas son casi idénticas a las que sufre la raza humana, en pocas palabras la acumulación de placa bacteriana y algunos depósitos de sarro dan paso a las encías sangrantes e infecciones que abarcan toda la mucosa oral además del tejido de las encías.
Por otro lado los dientes de los perros tienen una variedad de funciones que seguramente no conocías y verás a continuación:
- Colmillos: Sirven para sujetar presas vivas y punzar.
- Incisivos: Su función abarca mordisquear y asearse.
- Premolares: Desgarran con facilidad.
- Molares: Trituran huesos sin problemas.
Aunque sus dientes no tienen las mismas funciones que los de nosotros requieren atención y necesitan ser cepillados, si dejamos que la placa dental blanda tenga la oportunidad de endurecerse se convertirá en sarro o cálculos y la única forma de eliminarla será anestesiar a tu perro para realizarle una limpieza dental profesional.
Además la acumulación de cálculos conduce a la aparición de enfermedades graves en las encías acortando la vida de la mascota, algunos especialistas recomiendan usar un cepillo de dientes eléctrico y pastas de dientes saborizadas para crearle un hábito a tu perro, reducir el tiempo y lograr mejores resultados a comparación de un cepillo de dientes manual.
En cuanto al hilo dental no es necesario que lo uses entre los dientes del canino para prevenir las caries dentales, más bien se requiere para eliminar la placa bacteriana debajo de las encías, por su puesto esto será más fácil de hacer si empiezas cuando tu perro es sólo un cachorro, pero tampoco es imposible enseñarle a un perro viejo nuevos trucos usando técnicas adaptativas como pasta dental con sabor a cerdo o carne, la idea es que sea un momento para compartir y no lo vea como una tortura.
Otro aspecto a tomar en cuenta es que la perrarina o comida seca es mucho mejor para los dientes de tu perro, a diferencia de los enlatados y comida humana porque ambas dejan demasiados restos alimenticios entre los dientes, además contienen altas concentraciones de azúcar que alimentan sin cesar a las bacterias orales dando paso a las caries dentales.
Muchas personas piensan que cepillarle los dientes a su perro es una pérdida de tiempo, pero al sentarte todos los días con tu mascota conseguirás que su conexión siga creciendo mientras cuidas su salud oral y general mejorando su calidad de vida; curiosamente un dentista estadounidense concluyó que los pacientes que eran juiciosos con su higiene oral respetaban mucho la salud bucal de sus perros y como resultado llevaban una vida más sana.
Para resumir como cuidar la cavidad oral de tu perro te dejamos los siguientes consejos:
- Cepilla los dientes de tu perro diariamente con un dispositivo eléctrico adaptado para él o ella.
- Si el punto anterior no es razonable con tu rutina diaria o tu perro no lo tolera por lo menos asegúrate que obtenga limpiezas dentales profesionales con su veterinario.
- Utiliza pasta de dientes sin fluoruro especial para perros, incluso puedes elegir entre diferentes sabores y texturas para facilitar el cepillado.
- Reemplaza el cabezal del cepillo dental eléctrico cada 3 meses.
- No olvides raspar su lengua con el cepillo para eliminar las bacterias dañinas.
- Evita ofrecerle a tu perro carbohidratos refinados porque después se convierten en azúcar, productos de trigo, dulces o comida chatarra humana.
- Los huesos para perros que encuentras en las tiendas de mascotas son una excelente opción para que el mismo retire parte de la placa bacteriana al morderlo.
- Desinfecta y cuida el cepillo dental como lo harías con el tuyo.
Marca sus utensilios de higiene bucal para no confundirlos con los tuyos, aunque pienses que es riesgoso para ti las bacterias que están en tu boca son mucho más peligrosas para el organismo del canino.
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