Hace más de 150 años en 1864 un dentista ubicado en la Ciudad de Nueva York llamado S.C Barnum inventó un dique de hule en su consultorio dental, la idea era aislar una pieza dental en particular durante los procedimientos dentales.
Aunque su nombre parece extraño o intimida a algunas personas, el dique de hule o presa de goma, no es más que una hoja delgada elaborada en hule o goma (similar a los globos que utilizamos en las fiestas infantiles) que se sujeta alrededor del diente en que se va a trabajar, este simple mecanismo integra ventajas indiscutibles que se describen a continuación:
Mejora la visión del dentista
Cuando se aísla el diente o dientes que se están reparando se crea un fondo de contraste resaltando la pieza dental, de esta forma es más sencillo visualizarla y realizar un tratamiento dental de calidad.
Ayuda a mantener el diente seco
Los rellenos de amalgama o resina no son tan buenos si se colocan en dientes húmedos, además la unión de rellenos compuestos a las piezas dentales tampoco funciona bien si no están secos, por lo tanto se necesita una herramienta que mantenga el diente seco y en este caso son las presas de goma aseguran el éxito de estos procedimientos.
El dique de hule protege al paciente de varias formas:
- Evita que inhale restos producidos durante la preparación del diente o la colocación de materiales.
- Protege contra productos químicos y ácidos irritantes, como por ejemplo aquellos usados para desinfectar un canal dental o preparar los dientes para usar rellenos y resinas compuestas.
- Protege la lengua y mejillas del taladro dental.
Aísla el diente de las bacterias orales
Esto es especialmente importante en un tratamiento de conducto y al restaurar piezas dentales con caries muy grandes, que están cerca de la pulpa, mientras las bacterias y otros microorganismos se mantengan alejados de la pulpa durante el tratamiento los resultados serán más satisfactorios.
Reduce la duración de los procedimientos dentales
Cuando se utiliza dique de hule, la lengua no interfiere el trabajo del dentista y por ende es más fácil para él y sus asistentes realizarlo, o sea que aumenta la eficiencia del trabajo, reduciendo así el tiempo dentro del consultorio dental.
Tiene una sensación calmante en algunos pacientes
Como el dique de hule deja espacio para hacer contacto sólo con una pieza dental el dentista no tocará otras partes de tu bica como la lengua, labios o paladar, contactos que a muchas personas les resultan incómodos, en pocas palabras es una capa que separa sutilmente la boca de las manos del odontólogo siendo sumamente útil para los pacientes que se sienten ansiosos durante los tratamientos.
Apoya la administración de óxido nitroso
En los países que se emplea el óxido nitroso en la sedación de niños y adultos, el uso del dique de hule es especialmente útil porque obliga a los pacientes a respirar principalmente por la nariz, inhalando así la mayor parte del gas medicinal.
Protege al dentista de cualquier enfermedad
Cuando el odontólogo trabaja algún diente durante 30 segundos o más se expone a tantas bacterias como si hubieras estornudado directamente en su cara lo que podría provocarle múltiples enfermedades, además, el dique de hule evita el contacto directo con la saliva disminuyendo el riesgo de contagio patológico.
Ofrecen una restauración dental de mayor calidad
Un estudio realizado en los Estados Unidos por el Dr. Gordon Christsenen concluyó que el dique de hule permite al dentista tener un mejor desempeño, realizando así mejores restauraciones, de mayor calidad y más duraderas
¡Cuidado con las alergias!
Si eres alérgico al látex, caucho o goma debes informárselo a tu odontólogo mientras realiza tu historia clínica en la primera consulta, de esta forma él o ella evitará usar materiales dentales que desencadenen reacciones alérgicas, ciertamente son muy pocas las personas que sufren de este problema pero es importante que tanto el paciente como el dentista sean responsables de prevenir cualquier accidente.
¿Por qué algunos dentistas no utilizan los diques de hule?
Algunos odontólogos manifiestan que la colocación del dique de hule toma demasiado tiempo, que incomodan a los pacientes o que no tiene mayores beneficios, y ciertamente su instalación toma tiempo, primero se debe anestesia la zona para que no lastime al paciente, luego se realizan perforaciones en el dique según el o los dientes que se vayan a aislar, luego se pone una grapa o abrazadera alrededor de la pieza dental debiendo quedar perfectamente estable, además para asegurar que la abrazadera no se caiga accidentalmente a la garganta del paciente se debe colocar un hilo que permita jalarla si se desprende de su sitio, finalmente se estira el dique alrededor de la grapa o abrazadera y se pasa hilo dental entre todos los dientes para ponerlo en su lugar adecuado… ¿complejo no?; pero como todo en la vida, con la práctica diaria será mucho más sencillo su uso y tendrá los beneficios que hemos comentado.
Existe otro aspecto importante que debes tomar en cuenta y comentarlo con tu dentista, porque algunos pacientes que sufren de claustrofobia pueden sentirse realmente mal cuando se les coloca el dique de hule, aunque esta condición se refiere al miedo de estar en ambientes reducidos muchos de ellos no toleran esta sensación o en su cuerpo, además al sentir que no poseen control sobre la situación para ajustarla o quitarla cuando deseen los hace sentir más ansiosos, si este es tu caso debes decírselo al dentista desde un primer momento.
¿Alguna vez han utilizado dique de hule en tu tratamiento dental?
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