Es muy cierto que el color natural de los dientes no es completamente blanco y que se pueden presentar diferentes tonalidades de dientes dependiendo de factores como la edad de las personas, sus características étnicas, la región en donde ha crecido y muchos otros factores.

Pero cuando notas que tus dientes eran más claros y de pronto ya casi puedes decir que son amarillos, entonces debes analizar cuidadosamente lo que está alterando tan drásticamente su color.

Por sí mismo el cambio de color en los dientes no indica la presencia de problemas de salud dental ya que como hemos dicho, el oscurecimiento de los dientes se puede deber a múltiples factores. Sin embargo una visita al dentista puede aclararte algunas posibles causas en tu caso particular.

Para prevenir cambios en la coloración de tus dientes es muy conveniente que hagas una revisión en tus hábitos alimenticios y por supuesto que no olvides cepillarlos inmediatamente después de cada comida.

Existen medicamentos que pueden causar una pigmentación en los dientes y generalmente el médico advierte a sus pacientes de los efectos secundarios de los medicamentos que les receta.

Lo que a nadie nos dicen nunca casi en ninguna parte es que hay bebidas que pueden parecer inofensivas y sin embargo originan efectos secundarios entre los que destaca el oscurecimiento de los dientes.

Algunas bebidas no cambian por sí mismas el color de los dientes pero son altamente abrasivas por lo que dejan la superfice dental con una gran propensión a retener todo tipo de alimentos y sustancias que en todo caso son las que causan las alteraciones de color. Tal es el caso de las bebidas deportivas, que no necesariamente deben ser incoloras para que no dañen tus dientes.

Otro tipo de bebidas altamente agresivas para con los dientes son las gaseosas o bebidas carbonatadas, no solamente por los azúcares que contienen sino por otros ingredientes que poco a poco van debilitando el esmalte dental. Si eres afecto a ese tipo de bebidas trata de tomarlas usando popote/pajilla, que debes colocar lo más adentro de tu boca que sea posible para que el contacto con tus dientes sea el mínimo. Además debes cepillar tus dientes inmediatamente después de haber bebido una de ellas.

El té es una bebida que aporta muchos beneficios a la salud, sobre todo en lo que a antioxidantes se refiere. Además, si lo preparas en casa resulta más saludable ya que se evitan muchos otros ingredientes que se añaden a las bebidas embotelladas. Pero así se trate de té negro, verde o blanco, todos pueden manchar tus dientes, incluso más que el café.

El café y el vino son bebidas que también causan manchas y pigmentaciones en los dientes, ya sean solas o acompañadas por el tabaco. En el caso de los vinos, no importa que sean blancos, rosados o tintos, todos pueden manchar los dientes debido a los ácidos y otras sustancias que contienen.

Recuerda entonces seleccionar muy bien lo que vas a beber si deseas conservar una blanca y deslumbrante sonrisa que añada atractivo a tu imagen personal.

Recuerda que al dentista no lo visitamos solamente cuando nuestros dientes molestan. Tu aspecto saludable y atractivo depende mucho también de tu sonrisa así que ¡cuida tus dientes!

Ten presente que tu seguro dental puede cubrir diferentes tratamientos dependiendo del seguro que tengas, por lo que en muchos casos no tendrás que hacer desembolsos extras.