Antes que nada vamos a comenzar hablando sobre la parálisis cerebral, esta es una patología que integra anomalías motoras y deficiencias funcionales, básicamente afectando la capacidad en que una persona se mueve de forma voluntaria, también es conocida como encefalopatía no progresiva y se asocia principalmente con:
- Movimientos corporales descontrolados.
- Músculos rígidos o flácidos (Incluyendo boca, lengua y faringe).
- Trastornos convulsivos.
- Anormalidades relacionadas con el equilibrio.
- Disfunción sensorial.
- Discapacidad intelectual.
- Disartria (dificultad para articular palabras).
- Disfagia (complicaciones para deglutir).
- Alteraciones de percepción, equilibrio y orientación espacial.
- Marcha inestable y temblores.
Para algunos el trastorno es leve haciendo que los movimientos parezcan torpes o incómodos, algunos son independientes, otros requieren ayuda para realizar actividades específicas y por último existe un grupo que es 100% dependiente para moverse, alimentarse y lógicamente llevar a cabo su rutina de higiene oral.
Es importante saber que la parálisis cerebral en sí misma no causa anomalías orales, sin embargo si el encargado o familiares descuidan su salud bucal tendrá mayores probabilidades de experimentar enfermedades orales.
Existen cientos de retos físicos y mentales que tienen serias implicaciones en el cuidado bucal de esta población, pero no es impedimento para que los padres y cuidadores hagan su mejor esfuerzo, es vital acudir regularmente con el dentista para recibir chequeos, limpiezas dentales, tratamientos para condiciones específicas e indicaciones que facilitan todas las actividades relacionadas con la salud bucal.
A continuación conocerás algunas adaptaciones para aplicar desde casa durante el cepillado dental que hará el proceso más sencillo, lo primero es colocarte detrás de la persona acunando su cabeza mientras descansa tu mano alrededor de su mandíbula, es posible hacerlo mientras se encuentra en la silla de ruedas o en otra silla que sea cómoda.
Es común que sus extremidades se muevan con frecuencia complicando todo el proceso, pero debes saber que esto lo hacen pensando que pueden ayudar o es un juego aumentando los movimientos incontrolados, por esa razón debemos mantener un ambiente tranquilo y ayudar a que el niño o adulto con parálisis cerebral pueda relajarse, aunque esto no detendrá del todo los movimientos pero si reducirá su frecuencia e intensidad.
Nunca fuerces los brazos o piernas en posiciones que no sean naturales, solo debes permitir que mantenga una posición cómoda pero que no interfiera con el cepillado dental, observa sus movimientos y busca patrones que te ayuden a anticipar la dirección e intensidad de los mismos, tratar de detenerlos solo intensificará la respuesta involuntaria por eso lo mejor es mezclarse con ellos.
Acunar su cabeza suavemente en la mayoría de los casos les brinda una sensación de seguridad, y si es necesario voltearla es importante hacerlo lentamente, si en algún momento comienza a temblar realiza una presión suave pero firme en su brazo o pierna.
Intenta que sean sesiones cortas (cepillado dental mínimo 2 minutos) y tomar descansos frecuentes, en el caso de citas con el dentista es posible considerar la prescripción de relajantes musculares e incluso sedación, anestesia general u hospitalización si se requiere un tratamiento dental amplio.
Existen cientos de reflejos primitivos que se activarán en el proceso, consulta con el fisioterapeuta o terapeuta ocupacional donde no debes tocar, en que zona es mejor hacer agarres para manipular o movilizar segmentos específicos que se encuentren comprometidos motoramente.
Lo mejor es siempre minimizar las distracciones como movimientos bruscos de tu parte, luces, sonidos u otros estímulos, antes de realizar cualquier actividad exprésalo en voz alta pero calmada, firme y usando comandos verbales sencillos que se adapten al nivel intelectual de la persona, si es posible repite con frecuencia las instrucciones para compensar cualquier problema de memoria a corto plazo, y recuerda hablar de forma pausada y dar una sola instrucción a la vez es clave.
Si tu hijo, pariente o paciente con parálisis cerebral se niega al cepillado dental es ideal realizar un trabajo progresivo dejándolo explorar la sensación del cepillo solo en su boca, luego con un poco de agua, pasta y por ultimo realizar los movimientos circulares.
En los casos de dependencia total todo el trabajo lo hará el encargado, pero cuando el paciente tiene funciones manuales es posible crear aditamentos para que ellos mismos realicen el cepillado dental o aunque sea colaboren en el proceso, una opción es introducir bolas en el mango del cepillo para facilitar el agarre, alargar el mango para que no reducir la flexión de los brazos, hasta angular el cabezal para que sea más fácil su introducción en la boca.
Siempre recuerda no llevar el cepillo dental al final de la lengua para no estimular el reflejo gastroesofágico, es común que los dientes sean sensibles y muestren signos de erosión por el bruxismo (rechinan los dientes) este hace que desgasten constantemente su esmalte dental.
La enfermedad periodontal y caries dentales son comunes en esta población debido a la mala higiene bucal y complicaciones durante los hábitos orales, ya que las capacidades físicas y la maloclusión no contribuyen al proceso, sin mencionar que la respiración bucal y los efectos adversos a la medicación contribuyen a estos problemas dentales.
Algunos se benefician del uso de clorhexidina aplicada en spray sobre los dientes o el cepillo dental, la idea es sustituir el enjuague bucal ya que la mayoría no sabe escupir, por último es importante que después de ofrecer medicamentos altos en azúcar se enjuague inmediatamente la boca.
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