Esta afección, también llamada bizquera, se define como una anomalía de los ojos que afecta a los músculos encargados de controlar y coordinar los movimientos oculares.

Como consecuencia, se ocasiona una desviación y asimetría al poseer dos ejes visuales. Esta pérdida de alineamiento de un ojo en relación al otro puede presentarse en cualquier momento de nuestras vidas.

La Organización Mundial de la Salud asegura que a nivel mundial alrededor de cuatro de cada 100 personas sufren de estrabismo. Esto evidencia la frecuencia con la que se presenta dicha desviación.

Principales causas del estrabismo

La debida corrección del estrabismo dependerá principalmente de su origen. Este puede dividirse en las siguientes cuatro causas principales:

• Ambliopía estrábica.
• Sistema de vergencias y de acomodación.
• Causa idiopática.
• Causa sistémica.

Ambliopía estrábica

Esta condición, usualmente conocida como “ojo vago”, ocurre cuando el estrabismo ocasiona una disminución en la visión. Uno o ambos ojos presentan una visión inferior a la normal sin existir ningún origen patológico directo.

Suele desarrollarse durante la infancia por grandes disconformidades de graduación entre un ojo al otro. En este caso, el cerebro se centra en la imagen del ojo que está alineado de manera adecuada, obviando la del otro ojo cruzado.

Como consecuencia, si la condición se ignora permanentemente en la primera etapa de la niñez, es probable que no se forme una correcta visión en el ojo afectado. Y, en escenarios extremos, se pierda la vista.

Incidencia del ojo vago

Está presente en alrededor de la mitad de los niños que padecen estrabismo. Sin embargo, si en tu infancia no desarrollaste esta patología, no significa que cuando seas adulto no aparezca en tu vida.

Al no contar con una buena visión, el cerebro ignora aquella “imagen mala” que puede afectar el sistema binocular. Esto ocasionaría el ojo desviado a cualquier edad.

En este sentido, al padecer ambliopía a una edad adulta, no hay muchas posibilidades de que la visión de tu ojo vago se recupere en su totalidad.

Sin embargo, el tratamiento seleccionado para estos casos es someterse a una operación de estrabismo. En la mayoría de los casos, con ella, se logra mejorar tanto en el funcionamiento del ojo como su apariencia estética.

Sistema de vergencias y de acomodación

El ojo cuenta con un sistema acomodativo que se encarga de coordinar la anotomía muscular y cambiar la configuración de su lente interna. Tiene el objetivo de lograr el enfoque de objetos cercanos.

Al mismo tiempo, el sistema de vergencias organiza los músculos de desplazamiento de los ojos al momento de que un determinado objeto está cerca.

La combinación de las funciones de ambos sistemas contribuye a que ambos ojos se dirijan al mismo objeto y estén coordinados.

Desequilibrios en la coordinación de los ojos

Cuando estos sistemas no pueden mantener el equilibrio normal del ojo, suelen aparecer estrabismos como consecuencia de este problema. Los más usuales son el estrabismo intermitente por forias descompensadas y el acomodativo.

En los estrabismos por forias descompensadas, el tratamiento en adultos consiste en el uso de lentes cuando está presente un componente de acomodación.

Si no funciona, se recurre a la terapia visual para entrenar a los ojos, con el objetivo de incrementar las reservas fusionales y enfrentar la foria. Una cirugía de ojos es la última opción a la que se acude cuando ningún tratamiento resulta.

Antes de recurrir a ella, también se intenta estimular el enfoque y alineación de los ojos con prismas. Estos son lentes encargados de desviar la imagen al enfoque “cómodo” para los ojos con el objetivo de evitar un sobreesfuerzo.

Causa idiopática

Este origen quiere decir que no existe una causa conocida y es la más común en los casos de estrabismos. El tratamiento suele consistir en una operación.

Causa sistémica

El estrabismo puede derivarse de patologías que afectan la musculatura del sistema óptico o los nervios que controlan los ojos. Algunas de ellas son:

• Miastenia gravis
• Accidentes cerebrovasculares
• Síndrome de Down
• Prematuridad
• Hidrocefalia
• Tumores
• Miopía tiroidea
• Fracturas o traumatismos

En estos casos, el tratamiento dependerá de cada causa, de su variación para controlarse y de su aparición. Este puede ser una cirugía de estrabismo o el uso de prismas en tus lentes.

 Consecuencias del estrabismo

Esta condición, que origina que las dos visiones estén desalineadas, obstaculiza la capacidad de los ojos de focalizarse en un punto en específico. Suele derivar en patologías como:

• Estrabismo divergente y convergente
• Bizquera
• Heterotropía
• Ojos cruzados

Estas pueden empeorar con el transcurso del tiempo y dañar definitivamente fisonomías de la vista. Sobre todo, cuando no se trata debidamente la afección.

Tratamientos

En los diversos estrabismos que existen, los adultos pueden someterse a tratamientos con gafas especiales denominadas prismas.

También se practican operaciones directamente sobre los músculos encargados de mover los ojos, con el fin de corregir las desviaciones. Tales como la cirugía LASIK.

Además, existe la posibilidad de recurrir a métodos quirúrgicos menos invasivos como la inyección de toxina botulínica directamente en los músculos oculares.

Este es un procedimiento rápido y efectivo en el tratamiento de ciertos estrabismos. Además, sus posibilidades de sufrir efectos adversos son reducidas.