Después de comprar y usar los primeros días los retenedores (conocidos también como plaquitas o paladares) de forma apropiada, la mayoría de personas se pregunta ¿Cómo limpiarlos? Será que con agua es suficiente, hay que comprar limpiadores, tabletas especiales o existe un método natural, quédate hasta el final para que aprendas como limpiar tus retenedores, de forma segura sin productos químicos o agresivos para cuidar tú salud dental.
La mayoría de retenedores están elaborados con materiales porosos, al remojarse absorben todos los químicos que usamos para limpiarlos, luego al ponerlos dentro de la boca el cuerpo absorbe diferentes toxinas, que son sumamente dañinas no solo para nuestra salud dental, también para el cuerpo en general, a lo mejor ya has visto diferentes tabletas efervescentes que se agregan a un vaso con agua, para empapar los retenedores logrando resultados asombrosos en cuanto a limpieza, pero el problema está en que la mayoria contiene persulfato, un componente realmente toxico para el cuerpo humano, que llega a causar reacciones alérgicas y otros síntomas que varían en cada persona.
Las organizaciones de salud en diferentes países, han emitido advertencias con respecto a este tema, creando consciencia para que las personas busquen otras alternativas a la hora de limpiar sus retenedores, usar solo enjuague bucal no es la mejor opción, porque en su mayoria contienen alcohol y sulfato de sodio, estos dos componentes hacen que los retenedores se resequen al igual que la boca, aumentando las probabilidades de sufrir caries dentales, mal aliento y crear desbalances en la producción de saliva.
Un opción 100% eficaz y segura es usar bicarbonato de sodio, incluso es mejor que cualquier producto comercial que encuentras en el supermercado, mantiene la mayoría de bacterias que generan problemas dentales alejadas y aumenta el pH en la boca de forma natural, por lo general a las bacterias «malas» les encanta estar en un ambiente ácido y el bicarbonato va en contra de esto creando un entorno más neutral.
Por otro lado una gran cantidad de retenedores y otros dispositivos dentales, comienzan a adquirir un olor a fruta podrida después de un tiempo, y el bicarbonato de sodio es un desodorante natural, seguro y eficaz que combate el mal aliento sin ningún tipo de aditivo. Existe un mito que actualmente se encuentra derribado de esto, ya que expone el cepillado como una de las principales causas de rallones y rupturas en los retenedores, la verdad es que el cepillado es totalmente necesario y la única herramienta efectiva para eliminar el sarro que naturalmente se acumula entre los espacios huecos.
¿Qué daña los retenedores?
- Usar lejía, alcohol y otros productos químicos agresivos.
- Dejar que se sequen y no sumergirlos en agua.
- Sumergirlos en agua hervida y superficies con mucho vapor ya que se deforma la estructura.
- No tratarlos con cuidado.
¿Cómo limpiar los retenedores de forma segura y natural?
Lo primero es tratar siempre de mantenerlos húmedos, porque al dejar que se sequen el sarro más el material poroso comenzara a unirse y hasta deformarse, los retenedores deben pasar de tú boca a un recipiente con agua destilada y en algunos casos es posible incorporar bicarbonato pero eso depende de cada persona.
Es importante tomar en cuenta que el remojo no sustituye el cepillado, por lo que tendrás que cepillar los retenedores todos los días, por las noches antes de sumergirlos en agua, hay personas que solo lo hacen cuando ven el sarro y no es lo correcto, porque la base suele deteriorarse en menos tiempo, haciendo que gastes más dinero en reponerlos, en el caso que sientas que tienen demasiado sarro, lo mejor es llevarlos al dentista ya que este tiene las herramientas necesarias para limpiarlos de forma profesional, desinfectarlos y eliminar la acumulación de comida mediante una forma segura, sin usar productos químicos ni tóxicos.
Al momento de escoger los tipos, materiales y demás, lo mejor es optar por el material que sea menos poroso, así estarás seguro que no absorberá todos los fluidos y elementos que estén en contacto con el mismo, también asegúrate que el material este registrado y aprobado por los organismos competentes en tú país, ya que existen muchos que van en contra de la salud humana aunque sean súper funcionales.
Pasó a paso de la limpieza ideal
- Lava los retenedores suavemente con una pasta de dientes natural libre de glicerina, triclosan y polietileno.
- Luego enjuágalos muy bien y ponlos dentro de un vaso con agua durante toda la noche.
- Al despertar por la mañana toma tus retenedores y colócalos en un recipiente con agua destilada más bicarbonato de sodio por unos minutos y por último llévalos a la boca.
¿Cómo puedo evitar malos olores en mis retenedores?
Lo primero es decirle que no por completo al lavavajillas, agua hirviendo, enjuague bucal, limpiadores en tabletas y sustancias químicas por todas las razones expuestas anteriormente, lo mejor es usar aceite de coco que es antibacterial, huele muy bien y puede desinfectar los retenedores sin ningún problema, recuerda siempre consultar con tú dentista cual es la mejor opción que se adapta a tus necesidades individuales.
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