¿También los adultos pueden usar brackets? ¿No son solamente para niños? ¿Es cierto que si ya pasó la adolescencia ya no se puede corregir la dentadura? Estas y muchas otras preguntas surgen con mucha frecuencia ya que en otro tiempo, efectivamente la mayoría de los tratamientos de ortodoncia eran solamente para los niños y adolescentes. Este era un tema que causaba gran preocupación en muchos padres de familia debido a que los tratamientos eran sumamente costosos.
Si para cuando los pequeños alcanzaban la edad adecuada para iniciarlos no se disponía de los medios económicos, entonces se pensaba que ya no habría remedio posible y tendrían que soportar el problema por el resto de sus vidas. Lo importante aquí es que se trata no solamente de un problema estético sino también funcional, que de no ser atendido, con el tiempo puede derivar en problemas más graves y/o complicados.
Afortunadamente en la actualidad existen muy diferentes técnicas mediante las cuales es posible corregir la mordida también en adultos.
Una mordida deficiente puede conducir a una serie de problemas entre los que destacan:
- Caries, ya sea a causa de una higiene dental defectuosa por dificultad de acceso, o bien por desgaste inusual del esmalte dental.
- Enfermedades y otros problemas de las encías.
- Pérdida de piezas dentales.
- Masticación defectuosa que además puede acarrear problemas gastrointestinales.
- Problemas maxilofaciales.
- Dolores de cabeza, incluso migraña.
- Una mordida defectuosa no solamente debe preocuparnos por cuestiones estéticas sino también por el aspecto funcional y porque pueden surgir muchas otras complicaciones.
Hoy en día existen diversas técnicas y procedimientos para enderezar las piezas dentales desviadas y diferentes alternativas tanto en el aspecto funcional como en el económico.
Dependiendo de las circunstancias de cada caso en particular un tratamiento de ortodoncia puede tener una duración de entre uno y tres años. Generalmente se trata de colocar brackets en cada pieza, que luego se enlazan mediante alambres y/o ligas. En algunas ocasiones es posible elegirlos en el color de los dientes y dependiendo del caso, también pueden colocarse en la cara interna para que resulten menos visibles.
Los diseños actuales resultan más cómodos de llevar y en términos generales requieren menos ajustes que los utilizados en otras épocas. Por lo regular se emplean materiales que ejercen una presión suave pero constante, lo cual es más efectivo.
También existen algunos aparatos “invisibles” que están fabricados en materiales transparentes. Estos generalmente son removibles por lo que el paciente puede quitarlos para comer y para asearlos, aunque no son recomendables en todos los casos, sino solamente para corregir problemas leves.
Gracias a las nuevas técnicas de ortodoncia, y por supuesto a una buena salud y cuidado dental, cualquier persona puede actualmente tener una bella sonrisa.
Los tratamientos de ortodoncia pueden llegar a resultar costos, pero en la mayoría de las clínicas se van haciendo pagos parciales en cada sesión de ajuste. Algunos seguros dentales contemplan la posibilidad de este tipo de tratamientos, pero es conveniente cerciorarse de la cobertura que ofrece y cualquier tipo de limitante que pueda surgir.
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