La vista cansada o presbicia, como se le conoce en el campo de la medicina, es una patología que se puede encontrar en una gran parte de la población mundial, y que afecta a muchas personas sin tomar en cuenta el sexo, posición económica o las diferentes etnias.
Conforme la persona se hace mayor, la capacidad del ojo disminuye, haciendo que la patología se presente con mayor frecuencia conforme se va envejeciendo.
El problema de la vista cansada se origina cuando el cristalino empieza a sufrir una serie de cambios y empieza de esta manera a desenfocar los objetos que percibe el ojo.
A partir de los 40 años aproximadamente, la flexibilidad y suavidad del cristalino empieza a disminuir y se vuelve rígido por lo que no puede enfocar de la misma forma ocasionando que ciertas actividades como la lectura o la observación de cosas de cerca sea más difícil.
Estos síntomas te indicarán si padeces de vista cansada:
Entre los síntomas y signos que se pueden observar con mayor frecuencia en personas que padecen vista cansada podemos mencionar en primer lugar la visión borrosa. Este síntoma se presenta porque el ojo ya no tiene la misma capacidad de poder enfocar de forma correcta los objetos de pequeño tamaño.
Es común que las personas presenten dolores de cabeza de diferente intensidad, los cuales se dan principalmente luego de que han pasado un determinado tiempo forzando la visión ya sea en lectura o en observación de objetos.
Los pacientes por lo general suelen quejarse de cansancio, el cual también es un síntoma frecuente de ésta condición, y que se acrecienta cuando se observan objetos a cortas distancias.
Probablemente uno de los síntomas que más se identifican con la vista cansada es la necesidad que muestran las personas que la padecen de acercar los materiales, principalmente los de lectura a los ojos, para que puedan ser enfocados de una mejor manera y de esta forma las personas evitan que las letras se vean borrosas.
También es común que los pacientes experimenten signos como picazón en los ojos y enrojecimiento, además de molestias cerca del área de los ojos.
Diagnóstico
La forma correcta de realizar un diagnóstico sobre ésta condición visual es visitar al Oftalmólogo, quien se encargará de realizar un examen de vista y una prueba ocular para poder determinar el problema.
El examen consiste en una prueba de agudeza visual que muestra la capacidad que tiene el ojo de poder observar objetos a distancias cortas y lejanas.
Es importante mencionar que luego del diagnóstico, el paciente deberá utilizar un tipo de anteojo adecuado para su condición, puesto que la vista cansada no tiene cura al deberse a un problema relacionado con la edad, sin embargo, sí existen diferentes métodos y medios para poder compensar la pérdida de enfoque del cristalino.
Posibles tratamientos
Por regla general, la vista cansada no puede corregirse, peso sí puede mejorarse por medio del uso de anteojos, sin embargo, existen varios tratamientos con los cuales el paciente puede contar con el objetivo de mejorar su visión y de disminuir considerablemente la sensación de tener una vista cansada en el ojo.
Uno de los tratamientos que más son utilizados en los usuarios es la corrección óptica la cual se enfoca en reparar la capacidad de lectura y de enfoque en objetos cercanos.
El éxito que tenga el tratamiento con lentes para corregir y mejorar la vista cansada dependerá siempre de la adecuada graduación óptica que haga el Optometrista, del estudio de las necesidades que los pacientes presentan y por último, lograr encontrar el mejor modelo de la corrección óptica en cada situación que se presente.
Importancia de un seguro oftalmológico si padeces de vista cansada
A pesar de que no existe una cura definitiva que pueda reparar los problemas relacionados con la vista cansada, el poder contar con un Seguro Oftalmológico te puede traer muchos beneficios. Las visitas al Oftalmólogo que debes de realizar para poder obtener un diagnóstico seguro implican gastos económicos, así como los controles, la evaluación de la calidad visual y el diagnóstico.
Muchas personas acostumbran a ir al especialista, y luego de tener sus anteojos, no regresan ocasionando así que el problema vaya aumentando con el paso del tiempo.
Los servicios que una aseguradora puede brindarte durante el tratamiento son inmensos pues por medio de un seguro podrás reducir los costos que tendrás en citas, exámenes, lentes e incluso medicamentos. Además, te garantizas que al ir en busca de atención, tendrás una persona que realmente cuidará de ti y de tus ojos proporcionándote el mejor tratamiento posible.
Gracias al seguro oftalmológico podrás incluso tener una cita en caso de alguna emergencia, esto sin importar la hora, la fecha y el lugar.
Muchos de los seguros también incluyen importantes descuentos en farmacias o en lugares asociados a la clínica Oftalmológica por lo que si necesitas adquirir productos para tus ojos y visión, podrás hacerlo a un bajo costo. Por último, los seguros pueden incluir a tu familia, así que no solo tú te verás beneficiado al adquirir uno, sino que también, todos tus seres queridos.
Fuente:
www.admiravision.es
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