La diabetes es una enfermedad que se produce cuando la glucosa permanece en la sangre en vez de ingresar a las células y los tejidos, por lo que también se conoce con el nombre de azúcar en la sangre.  La glucosa en la sangre es la principal fuente de energía y proviene de los alimentos que se consumen.

La insulina, una hormona producida por el páncreas, ayuda a que la glucosa de los alimentos entre en las células para ser utilizada como energía.

En algunas ocasiones el cuerpo no produce suficiente o nada de insulina o no utiliza bien la insulina por lo que la glucosa permanece en la sangre y no llega a las células.

Con el paso del tiempo, la diabetes produce una serie de problemas de salud en el cuerpo, incluyendo los ojos.

Cuando la diabetes afecta los ojos, se pueden producir una serie de complicaciones visuales que se conocen con el nombre de enfermedades diabéticas del ojo, las cuales son un grupo de problemas que incluyen diferentes patologías.

Con el paso del tiempo, y principalmente si el paciente no es tratado por un especialista, la enfermedad puede producir una reducción en la visón e incluso problemas de ceguera.

Cómo la diabetes afecta al ojo

Cuando el paciente que padece de diabetes no controla de forma adecuada sus niveles de azúcar en sangre, pueden llegar a ocasionarse problemas graves de salud que afectan a los ojos.

A corto plazo, el paciente diabético puede experimentar la pérdida de la capacidad visual debido a la retención de líquidos y a la inflamación ocular que se produce.

Cuando los niveles de azúcar permanecen elevados durante largos periodos de tiempo, los vasos sanguíneos que se ubican detrás de los ojos se dañan haciendo que se generen nuevos vasos sanguíneos donde en realidad no deberían de existir, esto produce que se forma tejido cicatricial haciendo que la vista disminuya de forma considerable.

Patologías Diabéticas del Ojo

Las principales complicaciones dentro de este grupo de patologías son:

1. Retinopatía diabética

La retina es la película del ojo que nos permite ver todo a nuestro alrededor.  La diabetes puede dañar los vasos sanguíneos del ojo produciendo la retinopatía, la cual al mismo tiempo produce debilitamiento de vasos y filtraciones de líquido.  Cuando no es tratada a tiempo, se forman nuevos vasos en la superficie de la retina los cuales causan graves daños en la visión.

2. Edema macular diabético

La mácula es la parte de los ojos que necesitamos para ver y la diabetes ocasiona que ésta se inflame ocasionando la pérdida de la visión nítida e incluso ceguera.

3. Glaucoma

Este es un conjunto de enfermedades visuales que dañan al nervio óptico, cuando el paciente padece diabetes, se aumenta considerablemente la posibilidad de padecerlo ocasionando pérdida de visión y ceguera cuando no es tratada a tiempo.

4. Cataratas

Los cristalinos son estructuras de los ojos que permiten la visión nítida, cuando se padece diabetes se da una mayor propensión a que éstos se nublen incluso en edades tempranas donde no es común que la enfermedad se presente.

¿Puede ayudarte un Seguro de Visión si padeces de diabetes?

Los ojos y la vista son dos de los aspectos más importantes que necesita toda persona para poder realizar todo tipo de actividad diaria, y por esta razón, es de vital importancia lograr mantener unos ojos saludables, evitar el riesgo de padecer enfermedades oculares, y dar tratamiento y seguimiento adecuado en caso de padecer una enfermedad que pueda en algún momento llegar a afectar la visión.

Si padeces de diabetes, el contar con un Seguro de Visión puede ser de mucha ayuda.

Este tipo de póliza le brinda al cliente la posibilidad de disfrutar de una variedad de servicios relacionados con la Optometría que le ayudarán al usuario a detectar y tratar problemas relacionados con la visión.

El seguro le da la posibilidad de realizarse los exámenes oculares anuales necesarios para evaluar la condición de los ojos y la vista, especialmente en pacientes diabéticos.

Además, este tipo de seguro le da también la cobertura necesaria en insumos como lo son los lentes de contacto, los anteojos o gafas y las monturas de las mismas, por lo que contar con este tipo de póliza es una de las mejores opciones para lograr reducir los gastos que puede llegar a implicar el cuidado de la vista.

A cambio de una pequeña prima anual o bajas cuotas mensuales, el Seguro de Visión puede ayudarle al usuario a evitar largas filas de espera, altos precios en las consultas privadas y a recibir atención de calidad por parte de los Optometristas que se encuentran afiliados a la red de especialistas, así como también, a disfrutar de toda la innovación y la tecnología de las clínicas especializadas donde serán atendidos.

En algunos casos, si el tratamiento indicado no se encuentra cubierto por el seguro, éste le da la posibilidad de disfrutar de descuentos económicos importantes que le ayudarán a conseguir el procedimiento que el paciente tanto necesita.

Cuidar de la visión es muy importante para todos, pero especialmente para aquellos pacientes que padecen algún tipo de enfermedad que tarde o temprano puede dañar los ojos.

El Seguro de Visión es una de las mejores opciones para estos usuarios, para que así logren gozar de una buena calidad visual y un buen estado de salud en general.

Fuente:
www.niddk.nih.gov