La uveítis es un tipo de inflamación que se presenta en los ojos y que ocasiona un daño importante en la capa media de tejido que se encuentra en la pared de los ojos.

Cuando se presenta, lo hace de forma repentina y sus síntomas van empeorando con el paso del tiempo a gran velocidad.

Afecta principalmente a personas entre los 20 y los 50 años de edad aunque no se descarta la posibilidad de que pueda afectar también a los niños pequeños.

Esta enfermedad ocular si no es tratada a tiempo puede llegar a ocasionar graves problemas visuales que incluyen la pérdida de la visión.

Además de afectar directamente la úvea en el ojo, este tipo de problema también puede llegar a afectar otras áreas como el nervio óptico, la retina, el cristalino y el vítreo.

Síntomas

Los síntomas pueden ocurrir repentinamente y empeorar rápidamente, aunque en algunos casos se desarrollan gradualmente.

Pueden afectar a uno o ambos ojos.  Los signos, síntomas y características de la uveítis incluyen:

1. Enrojecimiento de los ojos
2. Dolor en el ojo
3. Sensibilidad a la luz
4. Visión borrosa
5. Puntos oscuros y flotantes en su campo de visión
6. Disminución de la visión

Causas

En aproximadamente la mitad de los casos, la causa específica de la uveítis no se conoce con exactitud.

En caso de determinar una causa, podría deberse a una lesión luego de una cirugía ocular, a algún tipo de trastorno autoinmune o inflamatorio, a diferentes tipos de infecciones como la toxoplasmosis, tuberculosis, enfermedad del arañazo del gato, enfermedad de Lyme o por algún tipo de cáncer que afecte el órgano visual.

Tipos de uveítis

Existen tres tipos de uveítis y se basan en el lugar de la úvea que se vea afectada. Los tipos son:

1. Uveítis anterior

La uveítis anterior se produce en la parte frontal del ojo.  Esta es la forma más común de la enfermedad, y se presenta sobre todo en personas jóvenes.

Muchos casos ocurren en personas sanas y pueden afectar solamente un ojo, aunque también está asociado con enfermedades reumatológicas, cutáneas, gastrointestinales, pulmonares o infecciosas.

2. Uveítis intermedia

La uveítis intermedia se presenta principalmente en adultos jóvenes.

El foco de la inflamación suele aparecer en el vítreo y está relacionada con diferentes tipos de trastornos, incluyendo la sarcoidosis y la esclerosis múltiple.

3. Uveítis posterior

La uveítis posterior es la forma menos común de uveítis.

Ocurre principalmente en la parte posterior del ojo, y a menudo afecta tanto a la retina como a la coroides por lo que también se le conoce con el nombre de coroditis o coriorretinitis.

Existen muchas causas infecciosas y no infecciosas que pueden llegar a producir uveítis posterior.

En este tipo de enfermedad, los signos pueden presentarse paulatinamente y desarrollarse por años antes de manifestarse.

Complicaciones

Entre las complicaciones que pueden presentarse en un paciente con uveítis se puede mencionar el glaucoma, las cataratas, daños en el nervio óptico, desprendimientos de retina y pérdida de la visión, principalmente.

Beneficios que proporciona el Seguro de Visión

Los ojos son uno de los órganos de mayor importancia en el cuerpo humano pues son la manera de tener acceso a las muchas vistas que brinda el mundo.

Sin ellos, el mundo sería un lugar muy diferente y oscuro.

Por esta razón, el cuidado que se les pueda proporcionar es muy importante para, además de mantener la vista, lograr tener un excelente cuidado de los mismos para así poder gozar de una mayor calidad de vida.

Uno de los principales beneficios que brinda el Seguro de Visión es que cubre los exámenes de rutina o exámenes visuales para el usuario que lo contrata.

Muchos problemas de la vista y otras enfermedades que pueden ocasionarlos se pueden diagnosticar por medio de un examen ocular.

Ya sea que se trate de hipermetropía o astigmatismo, un examen ocular es fundamental para ayudarle a lograr la visión que merece.

Incluso si una persona tiene una visión perfecta, por medio de estos exámenes se pueden detectar varias enfermedades y trastornos de salud durante el procedimiento antes de cualquier otro tipo de examen.  Por ejemplo, un doctor de atención de la vista puede detectar los signos tempranos de algunas enfermedades como la diabetes o la hipertensión arterial, los cuales son cruciales detectarlos a tiempo antes de que se vuelvan mortales.

Además de los exámenes de la vista, las pólizas que se encargan del cuidado de la vista le pueden ayudar al usuario con los costos de los anteojos o gafas, los lentes de contacto y las monturas para los lentes. También puede ayudarle a cubrir muchos servicios adicionales por medio de descuentos, como la aplicación de un protector de lentes para asegurar que sus gafas duren el mayor tiempo posible.  En los casos donde el tratamiento necesario no se encuentre bajo la cobertura de la póliza, el cliente aún podrá disfrutar de descuentos considerables con los cuales podrá tener acceso al tratamiento.

Los Seguros de la Vista se pueden contratar para una sola persona, en empresas para los empleados o incluir a toda la familia lo cual también representa un ahorro importante para el núcleo familiar.

Fuente:
www.mayoclinic.org