La dentadura es una parte de tu cuerpo que tiene importancia tanto desde el punto de vista funcional como estético. Con ella, masticas e influyes en la percepción de tu belleza personal.
Naturalmente, todos quieren tener y mantener una sonrisa impecable. En gran medida, esto depende de la salud que tengan tus dientes y tus hábitos de higiene bucal. No olvides que para tener una buena limpieza debes contar con:
- Cepillo de dientes.
- Hilo dental.
- Enjuague bucal.
Hoy, te traemos 15 consejos que debes tener siempre presentes para una higiene bucal óptima. Al seguirlos, garantizarás la salud de tus dientes.
Cepilla tus dientes antes de dormir
Además de cepillarte después de cada comida para eliminar sus restos, también debes cepillarte antes de irte a dormir. Mientras estás despierto, la saliva combate las bacterias causantes de caries, pero cuando duermes la producción de saliva disminuye.
Como consecuencia de la poca saliva producida, los ácidos relacionados con las caries se proliferan desmedidamente. Ten presente que, al acostarte sin lavarte los dientes, tendrás aproximadamente 6 veces más bacterias en tu boca.
Aprende a cepillarte correctamente
Los odontólogos recomiendan que el cepillo tenga una inclinación de 45 grados. En esa posición, debes hacer movimientos suaves de abajo hacia arriba y desde atrás hacia adelante.
Recuerda que los movimientos deben ser suaves, ya que un movimiento brusco puede producirte sangrado de encías o lesiones en la parte interna de los labios y de las mejillas. Además, el proceso de cepillado debe durar unos 2 minutos.
Usa un buen cepillo de dientes
Asegúrate de que el cepillo que uses tenga cerdas medianas. Preocúpate por la calidad del cepillo, ya que en el mercado existen muchos de presentaciones baratas que sueltan las cerdas o que resultan demasiados duros para tu boca.
Cepilla la lengua
Las bacterias no se alojan únicamente en los dientes, en la lengua también proliferan una gran cantidad de microorganismos. Estos influyen en la presencia de mal aliento y aparición de caries.
Para tal fin, puedes utilizar el mismo cepillo, usándolo con mucha suavidad. Sin embargo, muchos cepillos de dientes cuentan en la parte posterior con un raspador de lengua.
Usa hilo dental
Aunque con el cepillado se logra retirar gran parte de los restos alimenticios, así como las bacterias, no es suficiente para eliminar las partículas que se alojan entre los dientes.
Por ello, se recomienda el uso de hilo dental. Resulta un importante aliado en tu rutina de higiene bucal, ya que permite remover esos restos de comida inalcanzables para el cepillo.
No consumas tabaco
El tabaquismo tiene muchas consecuencias negativas sobre la salud en general. En cuanto a la salud bucal, puede conllevar a cáncer bucal, periodontitis, mal aliento y manchas en los dientes.
Por todo ello, superar el tabaquismo es una de las medidas que tus dientes más agradecerán. Si no tienes ese hábito, muy bien por ti.
Disminuye las bebidas azucaradas y dulces
Cuando el azúcar entra en tu boca se convierte en ácido. Se trata de una sustancia perjudicial para el esmalte dental que causa caries y desgaste.
Por ello, te recomendamos reducir el consumo de esos productos azucarados que contribuyen al deterioro de tus piezas dentales. Cuando comas o bebas alimentos con azúcar agregada, procura cepillarte lo antes posible.
Come productos crujientes
Algunos alimentos pueden ayudarte a eliminar residuos. Ese es el caso de aquellos de consistencia crujiente, como las zanahorias y las manzanas. Consúmelos de vez en cuando y estarás beneficiando tu limpieza bucal.
No olvides tu dosis diaria de calcio
El calcio es vital para mantener la buena salud de los dientes y de las encías. Por tal motivo, debes incluir alimentos ricos en calcio en tu dieta diaria.
Toma mucha agua
Además de la importancia que tiene para todo el organismo, el agua ayuda a tu salud bucal por varios motivos. Primero, mantiene tu boca hidratada y con una cantidad de saliva adecuada.
Además, también favorece la salud de los dientes porque, al beberla, se lleva los residuos de ácido que se alojan en las piezas dentales.
Cambia el cepillo regularmente
Los cepillos dentales tienen una vida útil de 3 meses. Si antes de ese periodo has sufrido alguna enfermedad bucal infecciosa, deberías cambiarlo inmediatamente.
Usa un enjuague bucal
Muchas personas creen que la función del enjuague bucal es esconder el mal aliento. En realidad, su función es inhibir la proliferación de una gran cantidad de bacterias. Usarlo cotidianamente te ayudará a prevenir las caries, la gingivitis, y otras enfermedades bucales.
Visita al dentista periódicamente
El dentista está capacitado para hacerte una limpieza bucal profunda, así como para detectar problemas en la cavidad bucal. Consulta al especialista en caso de que percibas:
- Sangrados frecuentes en encías.
- Dolores en los dientes o encías.
- Debilitamiento de tus piezas dentales.
- Pigmentaciones inusuales en los dientes.
- Cualquier molestia en tu cavidad bucal.
Mantén tu cepillo limpio
Debes enjuagarlo y almacenarlo en posición vertical. Muchas personas utilizan dispositivos para cubrir las cerdas del cepillo, creyendo que de esa manera está más protegido. Sin embargo, esto permite un mayor crecimiento de microbios.
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