Mayo se considera un muy hermoso mes ya que además de ser plena primavera es en muchas partes el mes en el que se festeja a mamá. Las flores y el follaje están en todo su esplendor y los pájaros están también en plena actividad. Por todo esto tal parece que es el mes ideal para festejarla, pero ¿conoces el origen del “día de la madre”?

En la actualidad hay una gran cantidad de personas que piensan que es una fecha establecida únicamente con fines comerciales, un truco de mercadotecnia para incrementar las ventas de lo que sea, ropa, aparatos, flores, comida, dulces, chocolates, pasteles, helados, zapatos, bolsas, joyería, viajes, muebles, ropa, perfumes, y mil cosas más. Pero en realidad se originó de una manera muy distinta y fue hace tanto tiempo que probablemente el término “mercadotecnia” ni siquiera se conocía, aunque el concepto se puede decir que es tan antiguo como el hombre mismo.

La primer celebración a la madre de que se tiene conocimiento fue en la antigua Grecia y se realizaba en honor a Rhea, quien era la madre de los dioses Júpiter, Neptuno y Plutón.

Posteriormente, en el siglo XVII en Gran Bretaña la situación económica era muy difícil por lo que era usual que las familias se diseminaran debido a que había que todos tenían que trabajar. Generalmente lo hacían como siervos en las casas o palacios de los grandes señores, lo que dejaba muy poco tiempo libre para la familia. Entonces a los siervos se les concedía un domingo al año, que se destinaba a visitar a la madre, para quien horneaban la entonces tradicional “tarta de las madres”. Se entenderá pues que se trataba de un día muy especial por lo que muchos emigrantes conservaron la tradición al llegar a América.

Posteriormente, en el siglo XIX se convocó a una manifestación pacífica en Boston, a donde fueron invitadas todas aquellas madres de familia cuyos hijos entraron a formar parte de los ejércitos. Por otro lado también en las culturas mesoamericanas se honraba a la madre, como es el caso de los Aztecas en México, que honraban a la madre de Huitzilopochtli.

Aunque estas celebraciones gozaban de gran popularidad iban cayendo en el olvido, pero no faltaron diversas iniciativas para que se estableciera una fecha fija. En algunos casos se fijó para el primero o el segundo domingo de mayo. Finalmente en 1914 fue proclamado en los estados Unidos de Norteamérica el segundo domingo de mayo como el Día de la Madre. Esa primera vez el segundo domingo fue día 10 y es por esta razón que en algunos países como México se festeja a las madres ese día aunque no sea domingo.

Ahora que ya sabemos que no se trata de una fiesta puramente comercial podemos estar seguros de que Mayo es un mes para sonreír, y qué mejor que hacerlo con mamá, con nuestros hijos, con la abuela, nuestras tías, las madres de nuestros amigos, etc.

Y hablando de festejos y sonrisas, seguramente a lo largo de nuestra vida hemos asistido a muchos, y hemos conocido una gran cantidad de personas. Es muy típico en el ser humano el juzgar a simple vista a quienes vemos por primera vez o a quienes apenas comenzamos a tratar. ¡Y no digas que no! Todos lo hacemos, de una manera o de otra, tal vez solo para nosotros mismos o tal vez lo comentamos con alguien más. Pero te has puesto a pensar ¿qué dice tu sonrisa de ti?

Y es que la sonrisa es uno de los factores que más llama la atención en una persona, según arrojan muy diferentes estudios realizados por expertos. Y para ello no importa ni la edad ni el sexo, ni muchos otros factores de nuestra apariencia y personalidad.

Una sonrisa es envidiable cuando muestra unos dientes bien alineados, limpios, blancos, y perfectos en una boca sana.

Una persona con una dentadura completa donde no hay dientes rotos, manchados o desviados puede sentirse con la absoluta confianza de sonreír libre y naturalmente.

Una sonrisa con dientes más blancos es la sonrisa de una persona más joven y sana. Esto hoy en día es muy fácil de obtener mediante innovadores y sencillos tratamientos dentales.

Por otro lado una bellísima sonrisa puede crear toda la buena impresión que se quiera, pero al momento de abrir la boca y despedir mal aliento, toda aquella magnífica imagen se destruye como por encanto. El mal aliento es la pesadilla que sufre quien lo tiene pero también quienes están a su alrededor. ¡Y pensar que una visita al dentista puede hacer milagros por nuestro aliento!

Este Día de la Madre ¿no crees que la sonrisa de mamá merece algo más que una plancha, una licuadora o un sartén? Mayo es el mes perfecto para que su sonrisa sea tan blanca como antes o para que acuda a recibir la atención dental que requiera. Una magnífica alternativa para ella en este día de la madre es obsequiarle un seguro de atención dental para que ella haga uso de él cuando mejor le convenga. O puedes obsequiarle algún tratamiento dental que necesite. Son inmejorables opciones para que ella pueda seguir conservando su bella y amorosa sonrisa por mucho tiempo y con el orgullo de que son sus hijos quienes le han brindado la oportunidad..