Una preocupación que todos tenemos o deberíamos tener es la salud dental. No pienses que el cepillarlos diariamente después de tomar tus alimentos, y contar con un seguro de atención dental es todo lo que puedes hacer por ellos. Y hablando de alimentos, ¿sabías que hay algunos que pueden dañar tus dientes a pesar del cepillado?

Seguramente cuando escuchas las palabras “dulces y caramelos” de inmediato piensas en que causan obesidad y caries. Pero para tus dientes no solamente es a la caries a lo que debes temer. Los caramelos o dulces de cierta dureza como los chiclosos pueden causar otro tipo de problemas difíciles de tratar ya que pueden originar fracturas o que los dientes se estrellen dejando áreas muy sensibles y/o susceptibles a sufrir de caries. También, en el caso de dientes tratados con resinas u otro tipo de empastes, coronas, brackets, prótesis, etc., existe riesgo de que se aflojen o se despeguen, lo que puede agravar el problema. Cuando se padece de gingivitis o periodontitis sucede lo mismo ya que algunos dientes pueden haber comenzado a aflojarse y sufrir lastimaduras a causa de los dulces duros o chiclosos.

Lo mismo te puede ocurrir si eres de las personas que disfrutan al masticar hielo. Esto además de fracturas puede causar un exceso de sensibilidad.

El problema de las fracturas en los dientes no se reduce solamente a la cuestión estética ya que puede haberlas en áreas en donde no afecten tu sonrisa, pero también puede tratarse de cuarteaduras o fracturas sumamente pequeñas, que incluso resulten imperceptibles pero que con el tiempo deriven en caries u otros problemas.

El limón y los cítricos en general resultan excelentes para la salud, pero cuando son consumidos junto con sal y en forma habitual, los dientes son los principales perjudicados. El esmalte dental se desgasta y se debilita por la acción de estos alimentos por lo que debes consumirlos con moderación y beber agua natural en abundancia.

Algunas bebidas suelen provocar el efecto de boca seca, como el café, algunos tés, el vino y las bebidas alcohólicas entre otras. Si las acostumbras con frecuencia no olvides tomar abundante agua a lo largo del día. Y ¡cuidado con las bebidas deportivas y las vitaminadas! Aunque la publicidad de dichas bebidas las presenta como algo muy saludable contienen azúcares y otros ingredientes que si no hay un aseo después de haberlas consumido, pueden también ser fatales para tu dentadura.

Los frutos secos y las frutas deshidratadas son muy recomendables en muchos tipos de dieta, pero hay que recordar que algunos son ricos en aceites y otros son de consistencia pegajosa. En ambos casos es muy fácil que queden residuos de ellos adheridos en los dientes por lo que no hay que olvidarse de cepillarlos cuidadosamente y beber agua.

En el caso de las botanas como las papas, las palomitas y otros productos ricos en almidones no solamente debes evitarlas por ser consideradas alimento chatarra, o porque estés a dieta. Para tus dientes también pueden ser muy dañinas ya que al masticarlas dejan residuos de almidón entre los dientes, y al descomponerse, junto con la placa dentobacteriana pueden dañar el esmalte dental, producir mal aliento, etc.