La función visual incluye una serie de factores como la agudeza visual, el campo visual y la sensibilidad al contraste, los cuales en coordinación trabajan para poder realizar las tareas diarias.
En algunas ocasiones la visión puede verse afectada por las actividades de la vida diaria independientemente de los efectos de la edad, la salud general, la depresión y enfermedades general del cuerpo humano que producen daño en los ojos.
Por esta razón, estar al pendiente de la salud y tener un conocimiento sobre los síntomas que pueden desencadenarse puede ayudar a detectar problemas relacionados con enfermedades sistémicas.
Son varios los factores de riesgo que pueden llegar a lesionar la vista y por esta razón, los chequeos médicos y los exámenes de la vista al menos una vez al año son fundamentales para mantener una buena salud visual y general.
Con el paso del tiempo la Oftalmología y Optometría han avanzado de forma considerable y existen en la actualidad una serie de técnicas de diagnóstico, tratamientos nuevos e innovadores y cirugías que pueden ayudar al paciente a mejorar su problema de visión.
La medicina relacionada con el área de la prevención juega un papel sumamente importante en la prevención, el diagnóstico y el tratamiento adecuado de forma precoz de enfermedades del cuerpo humano que se encuentran asociados con patologías oculares.
Factores de riesgo
Existen varios factores de riesgo que pueden en algún momento, si no son tratados a tiempo, ocasionar una serie de condiciones visuales que pueden comprometer la vista.
Los más comunes son los siguientes:
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Retinopatía diabética
Esta condición se presenta en pacientes que padecen de azúcar en la sangre como se le conoce normalmente a la Diabetes.
Esta patología produce un grave daño de forma progresiva en las células vasculares que se encuentran ubicadas en la retina ocasionando que la capacidad visual disminuya de forma considerable.
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Degeneración macular por la edad
Con el envejecimiento también envejecen los ojos y esto produce un daño en la visión considerable. Además, el uso de tabaco, la hipertensión arterial y los factores genéticos también influyen de manera considerable con la condición médica.
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Tabaquismo y alcohol
El tabaco puede afectar la visión y provocar cataratas, glaucomas y retinopatías diabéticas, es un mal hábito que también se relaciona con el daño al nervio óptico y la degeneración macular.
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Estrés
Cada día más, las personas se ven sometidas a altos niveles de estrés que repercuten en muchas ocasiones en la salud visual de los ojos.
Las largas jornadas laborales frente a un computador y el estado de ánimo suelen influir de forma negativa en el problema. Afecta al ojo interna y externamente y es una de las causas principales de ceguera en el adulto mayor.
Por otra parte, el alcohol puede causar daños en la visión pues la retina puede metabolizarlo afectando el epitelio pigmentario de la misma y disminuyendo la capacidad visual.
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Colesterol alto
Esta condición obstruye las arterias y se puede acumular en los vasos sanguíneos que se encuentran en el ojo produciendo la aparición de alteraciones oculares.
Un Seguro Visual puede convertirse en tu mejor aliado
En la actualidad, cada día más y más personas contratan un seguro de salud complementario con el cual pueden enfrentar de forma más sencilla y económica una serie de gastos médicos visuales que no son cubiertos en el campo privado por el seguro de salud convencional.
Con el paso del tiempo las personas se han dado cuenta de la importancia que implica mantener una vista saludable y por esta razón, optan por contratar una póliza que se encargue de cuidar su vista.
El Seguro de Visión es un tipo de plan que se contrata en una aseguradora determinada y es además un tipo de seguro complementario el cual ha sido diseñado especialmente para poder ayudar al usuario a cubrir y a financiar de forma más accesible los gastos relacionados con el cuidado que se le debe de brindar a la vista.
Este tipo de seguro le da la posibilidad al paciente de realizarse los exámenes oculares necesarios para detectar posibles complicaciones visuales y en algunos casos incluso la presencia de factores de riesgo que pueden llegar a ocasionar graves daños en la visión.
Además, el usuario tiene derecho a recibir una cobertura que le ayude a adquirir algunos tratamientos como los anteojos o gafas, las monturas para los mismos y los lentes de contacto dependiendo de la indicación del Optometrista.
En muchas ocasiones, cuando el seguro no contempla un tipo específico de tratamiento, sí brinda la posibilidad de disfrutar de descuentos importantes que pueden ayudarle a adquirir lo que necesita para el adecuado cuidado de la salud visual.
Los planes de Seguro de Visión ofrecen todos estos beneficios por medio de diferentes planes de descuentos o de bienestar a cambio de una pequeña prima anual o mensual en algunos casos.
Los pacientes podrán escoger su especialista entre una larga lista de Optometristas y Oftalmólogos afiliados a la red, y podrán además ser atendidos en clínicas odontológicas que cuentan con lo más innovador en tecnología para mejorar la atención del paciente.
Fuente:
www.news-medical.net
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