Si usted padece de problemas que implican dientes torcidos y/o una mordida desalineada existe una gran variedad de tratamientos que pueden ayudarle a enderezar las piezas dentales, estos aparatos incluyen los ortodóncicos y los retenedores.
Si los brackets son la mejor solución para usted, el Dentista u Ortodoncista le prescribirá un aparato específico que se adaptará a sus necesidades.
Los frenos o frenillos pueden consistir en bandas, alambres y otros aparatos correctivos fijos o removibles que actuarán en los dientes con el objetivo de movilizarlos hacia una posición correcta.
¿Cuánto tiempo tendré que usar brackets?
El tiempo necesario para el tratamiento con brackets varía de persona a persona, dependiendo de la gravedad del problema, la cantidad de espacio disponible, la distancia que deben recorrer los dientes, la salud de los mismos, las encías y el hueso de soporte, y de cuán atentamente el paciente siga las instrucciones.
En promedio, sin embargo, una vez que se colocan los aparatos, por lo general permanecen en su lugar entre 18 meses y 3 años.
Después de retirar los aparatos ortopédicos, la mayoría de los pacientes necesitarán usar un retenedor todo el tiempo durante los primeros seis meses, y luego solamente mientras duermen por varios años.
¿Con qué frecuencia debo consultar al ortodoncista durante el tratamiento?
Su Ortodoncista necesitará verlo aproximadamente cada mes para asegurarse de que los brackets ejerzan una presión constante sobre los dientes.
Para crear más tensión y presión en los dientes, el ortodoncista ajustará los alambres, resortes o bandas elásticas de los frenos.
En algunos casos, los frenos por sí solos no son suficientes para enderezar los dientes o desplazar la mandíbula y es posible que sea necesario usar un aparato externo en casa por la noche.
¿Pueden quitarse los brackets en casa?
Si por tu mente ha pasado la idea de quitarte los brackets dentales en casa por tus propios medio, lo mejor será que reconsideres esta opción.
Este procedimiento debe de ser realizado únicamente por un especialista y dentro de un establecimiento equipado adecuadamente para este tipo de procedimiento.
Son muchos los riesgos que pueden surgir cuando un paciente decide remover los frenillos en casa, entre ellos podemos mencionar los siguientes:
- Daños en la boca debido a los instrumentos que se usen en el hogar para poder remover los brackets de los dientes.
- Ulceras y daños en las piezas dentales.
- Se pueden provocar fracturas dentales pues las personas que no tienen conocimiento en ortodoncia no conocen la fuerza necesaria ni cuentan con los aparatos específicos para poder retirar los brackets, hacer demasiada presión puede ocasionar que la pieza dental se quiebre.
- Cuando se colocan los brackets se utiliza una especie de resina que únicamente puede ser retirada por el especialista, cuando los brackets se quitan en casa y esta goma no se retira, el esmalte dental se daña irreversiblemente dejando manchas amarillas en los dientes.
- Cuando usted considera quitar los brackets en casa existe una alta posibilidad de perder sus dientes permanentes.
Seguro Dental: Qué está cubierto y lo que no lo está
Si tiene beneficios dentales, es importante que conozca ciertos aspectos que están incluidos dentro de la póliza, así como algunos que no lo están, o en el caso de que se encuentre pensando en contratar un Seguro Dental, lo mejor es obtener toda la información posible para que de esta forma esté seguro de los beneficios con los que puede llegar a contar en el momento de adquirir un seguro.
El Seguro Dental es una cobertura de seguro para individuos que les brinda protección contra algunos costos dentales.
Asegura de esta forma la economía del paciente contra los gastos de tratamiento y cuidado de enfermedades dentales y accidentes en los dientes.
Por lo general, las pólizas dentales abarcan una parte del costo del tratamiento preventivo, los empastes, los tratamientos de aplicación de flúor y las extracciones de dientes, usualmente el paciente se encuentra está cubierto por dos visitas preventivas al Odontólogo al año y en algunas ocasiones las coronas, puentes y hasta los frenos.
Es importante recordar que la mayoría de los planes cubren el 100 por ciento de la atención preventiva que incluso brinda al usuario la posibilidad de realizarse radiografías y colocar selladores en las piezas dentales.
Existen varios tipos de seguros en el mercado, pueden ser de empresas o individuales privados.
Como muchas cosas, el mejor momento para comprar un Seguro Dental es cuando el paciente aún no lo necesita, o al menos cuando no lo necesita de forma urgente esto porque puede darse el caso de que algunas compañías de seguros dentales frecuentemente tengan períodos de espera antes de cubrir ciertos procedimientos, generalmente los que son más costosos y por esta razón es mejor estar prevenidos.
En algunos casos, puede que un tratamiento más profundo sea necesario y algunas veces el seguro no cubre este tipo de procedimientos, sin embargo, el contar con una póliza que cuide los dientes, le permitirá tener acceso a descuentos importantes que le facilitarán el acceso a lo que se necesite con tal de obtener una buena salud bucodental, esto supone un gran ahorro económico para el paciente.
Fuente:
www.theschulhofcenter.com
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