La familia influye decisivamente en nuestras vidas. La relación entre sus miembros, así como el ambiente familiar, determinan tus actitudes, valores y afectos. De igual modo, tu capacidad de relación interpersonal.
Es por ello que un buen ambiente familiar es primordial en la vida de toda persona. Especialmente, en la de un niño. El hogar debe ser el área donde se eduque y aprenda a respetar y valorar. Por otro lado, la escuela complementará esto.
¿Qué es el ambiente familiar?
Es importante determinar a qué se hace referencia cuando se menciona “ambiente familiar”. Se refiere al conjunto de relaciones que se establecen entre cada uno de los miembros de la familia.
Cada familia lleva, vive y disfruta de forma particular estas relaciones. Esta es la razón que diferencia un hogar de otro. Sin embargo, en cada ambiente familiar, deben existir normas y funciones específicas.
Por ejemplo, la influencia educativa y afectiva juega un rol fundamental en el desarrollo de los miembros familiares más jóvenes. Los padres serán el ejemplo o el patrón que el hijo muchas veces seguirá.
Importancia del comportamiento
El comportamiento de los padres, así como sus actitudes tendrán un impacto directo en el desarrollo y la noción de sus hijos. Las acciones están relacionadas directamente con los principios de las figuras paternas.
Sin embargo, hay tendencias marcadas que diferencian una familia de otra. En algunas familias, el ambiente es positivo y cálido. Y se proporcionan principios y actitudes correctas para el crecimiento y desarrollo de los hijos.
Por otro lado, existen familias donde sus integrantes no viven ni llevan la responsabilidad de sus roles forma correcta. Por ejemplo, en las actitudes y valores sentimentales.
Influencia del ambiente familiar en los niños
La falta de afecto en un ambiente familiar tendrá consecuencias emocionales en el desarrollo del niño. Esto ocasiona que el infante adopte conductas inapropiadas, desarrolle baja autoestima y repita las malas conductas de los padres.
Para que la influencia del ambiente familiar sobre el niño tenga efectos positivos en su vida, es fundamental que existan ciertos elementos en ella. Estos garantizarán que todos sus miembros disfruten el ambiente familiar. Algunos son:
- Afecto y amor.
- Autoridad y participación.
- Buenas intenciones.
- Trato positivo.
- Tiempo para la convivencia.
Afecto y amor
Es importante que las figuras paternas de un seno familiar tengan la capacidad de demostrar afecto, amor y cariño a cada uno de sus integrantes. No hacerlo traerá consecuencias futuras en el desarrollo de los más pequeños.
Es fundamental que, en un buen ambiente familiar, el niño se sienta amado por sus padres y los miembros de la familia. Para ello, el requisito no solo es demostrarlo con palabras, también es importante hacerlo con hechos.
Si eres papá o mamá, demuéstrale a tu hijo que lo amas y quieres tal como es, que sientes orgullo de él y valoras su felicidad. Lo importante es hacerle ver que cuenta con tu apoyo, cariño y atención siempre que lo necesite.
Autoridad y participación
Este punto está ligado con la forma en la que se ejerce la autoridad en el seno familiar. Se debe saber cómo, en qué medida y momento ejercer autoridad. Esta facultad es una obligación en la crianza de los hijos.
Tener autoridad frente a tus hijos ayudará a promover la educación y el respeto por los demás. Sin embargo, para que los resultados sean positivos, esta debe ser aplicada en función educativa y persuasiva desde que los hijos están pequeños.
También debe aplicarse en modo participativa cuando los hijos están en edades mayores. Toda corrección debe estar precedida por razones justificables y coherentes. Recuerda que también es importante considerar la opinión de tu hijo.
Buenas intenciones
Las intenciones de los padres hacia el trato de todos los miembros del seno familiar deben ser buenas. De igual modo, la autoridad y las relaciones entre miembros.
La autoridad no debe ser aprovechada a conveniencia ni para utilizarse como un privilegio o ventaja sobre los demás. La intención es generar un ambiente pleno en el que cada uno de los integrantes de la familia se sienta a gusto.
Trato positivo
El trato que le das a cada uno de tus hijos o a tu pareja debe generar confianza, aceptación y tranquilidad en el hogar. Un trato positivo reducirá la posibilidad de quejas por parte de los miembros de la familia.
Es importante saber apreciar las cualidades de cada integrante familiar. Admirar sus cosas buenas y compartirlas con todos. Especialmente si sus acciones contribuyen al mejoramiento del ambiente familiar.
Sin embargo, las cosas negativas también deben comentarse para evitar que el patrón siga repitiéndose. Sin embargo, el afán por enmendar los problemas no debe sobreponerse por las cosas buenas o cualidades del integrante.
Tiempo para la convivencia
Es importante compartir ciertos momentos al día, por ejemplo, la hora del desayuno o la cena. Con ello, compartirás con tu familia los planes que tienen para el día o se enterarán de cómo estuvo la rutina de cada uno.
Estas acciones generan autoconfianza y afecto en cada uno de sus integrantes. Es importante hacer notar que cada miembro es importante para la familia. Todos deben ser tomados en cuenta.
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