Aunque pueda parecer un sin sentido, la evidencia demuestra que surgen más problemas bucodentales durante los periodos vacacionales. Ello se confirma por un aumento significativo en la cantidad de pacientes que acuden al odontólogo.

Esta situación se debe a un descuido de la higiene bucal. Por lo tanto, te daremos unas recomendaciones para que cuides tus dientes y encías, a la vez que disfrutas de tus añoradas y merecidas vacaciones,

Siguiendo simples pasos, evitarás problemas orales. Además, te ahorrarás el dinero que tendrías que gastar en procedimientos para recuperar tu salud bucal.

Cepíllate y usa hilo dental

Sabemos que utilizas el descanso de trabajo para viajar, pasear y realizar cualquier cantidad de actividades vacacionales. Pero no debes descuidar tu limpieza bucal por ese ajetreo.

Por todos los medios, intenta mantener los hábitos adecuados de higiene bucal.  Tres elementos tendrás que llevar siempre contigo:

• Cepillo de dientes.
• Dentífrico.
• Hilo dental.

En el mercado, existen presentaciones de estos utensilios que puedes llevar a todos lados. Pequeños y compactos para guardar en carteras, bolsos o maletines. Incluso, encontrarás una presentación pequeña de enjuague bucal.

Este botiquín dental no te será una molestia por peso ni por espacio. Además, garantizará que puedas limpiar tu boca como de costumbre en cualquier lugar.

Mastica chicle

Si en el lugar donde estás se te imposibilita cepillar tus dientes, trata de reducir el impacto de haberte saltado el cepillado. Para ello, lo más recomendable es que mastiques chicle.

Cuando lo haces, produces más saliva. Esto reduce el impacto de los gérmenes en el esmalte dental, además de que ayuda a prevenir el mal aliento.

Eso sí, debe ser chicle sin azúcar, puesto que si la contiene no estarías haciendo nada. El azúcar en la boca se convierte en ácido y este ataca los dientes causando caries.

No te excedas con los dulces

En vacaciones, bien sea que las pases en casa o viajes, tiendes a descuidar tus hábitos. Una de esas costumbres que más se descontrola es la alimentación.

En primer lugar, comienzas a comer a deshoras y en cantidades arbitrarias. En segundo lugar, comes lo que sea. Siempre debes cuidar toda tu alimentación, en general.

Especialmente, poner cuidado en lo que se refiere a los dulces. No olvides que todos los productos comestibles con azúcar añadida pueden ocasionar caries con bastante rapidez. Así que te aconsejamos:

• Si quieres comer dulces, opta por las frutas.
• Cada vez que los comas, cepíllate los dientes.
• Pon mucha atención al aliento.

Procura contar con productos que te permitan prevenir el mal aliento, así como deshacerte de él.  Si se te hace difícil cumplir al pie de la letra tu higiene oral, ten a la mano un spray o unos chicles para combatir la halitosis.

Por ejemplo, si tienes un viaje largo, posiblemente pases mucho tiempo sin hablar en el trayecto y sin cepillarte la boca. Ten este tipo de situaciones en mente.

Sobre todo porque, además de los problemas bucales que generan, es muy desagradable la sensación del mal sabor de boca.

No mastiques alimentos duros

¿Te imaginas estar pasándola bien y que por morder un pedazo de hielo se te rompa un diente? Por supuesto, arruinarías tus vacaciones.

Los alimentos duros como el hielo o los caramelos representan un riesgo para tus dientes si los muerdes, pues pueden ocasionar una rotura. Evita esta práctica no solo en vacaciones, sino en todo momento.

Cuida tu boca al practicar deportes

Especialmente si se trata de deportes extremos. Intenta proteger tu boca, pues ante un fuerte impacto en la zona, podría ocasionarse la rotura de algún diente. O más de uno. Incluso, también se presentaría inflamación y dolor de encías

Evita las bebidas muy frías o muy calientes

Las temperaturas extremas pueden causarte sensibilidad en las encías, así que ten cuidado con ellas.

Modera los alimentos con muchos condimentos

Uno de los encantos de viajar es la idea de consumir platillos propios de la gastronomía del lugar al que vas. Además, probar sabores desconocidos es una parte importante del turismo.

Eso está muy bien, pero se cuidadoso respecto a los componentes de lo que comes. Los alimentos muy condimentados causan manchas en los dientes, así que modera su ingesta.

Ve al odontólogo

Aprovecha que tendrás unos días libres de tu trabajo, de tu escuela o de tu universidad para ir a visitar al dentista. Antes de viajar y de pasear, destina un día para la consulta odontológica.

Esto vale para todo el mundo, pero, en especial, para aquellos que tienen ortodoncia. Antes de irte de viaje, dirígete a tu consulta para que te asegures de que todo está en orden.

Además, pide recomendaciones específicas en correspondencia al lugar al que piensas ir y las actividades que planeas realizar.

Pauta una consulta para después del viaje

Aunque hayas ido al odontólogo antes de viajar o no, pauta una visita al dentista para que te evalúe y tome las medidas pertinentes.

Si descuidas tu higiene bucal durante las vacaciones, la asistencia del especialista evitará problemas bucales mayores.

Como mínimo, practícate una limpieza profesional. Con ella, se eliminarán los riesgos de afecciones dentales que pudieran generarse producto de los excesos y descuidos cometidos durante las vacaciones.