En el mundo, la mayoría de las personas alguna vez sufrimos de alguna alergia, ya sea por el polvo, medicamentos y hasta por los cambios climáticos fuertes. Como por ejemplo: de frío a caliente de manera brusca.
Muchos creemos que un simple antialérgico es la cura para todos los males, pero no sabemos las consecuencias que se generan a nivel bucodental, y que se puede traducir en diversas enfermedades tanto de los dientes como del tracto bucal.
Como nunca es tarde para aprender, te vamos a dejar una serie de consejos que seguramente te servirán si con frecuencia sufres de alergias y quieres cuidar tu salud bucal.
¿La alergia puede influir en los dientes?
Aunque parezca algo increíble, sí es posible. Las personas que sufren alergias constantemente suelen tener problemas bucodentales, por lo cual deben asistir con regularidad al odontólogo. Diversos síntomas se producen en los dientes tras la formación de una alergia, y estos son:
Dolor y molestia
Este es el síntoma más frecuente, y por el que más asisten a consultas odontológicas los que padecen de constantes alergias. Cuando los conductos que se encuentran en la cabeza se han congestionado de moco, comienzan a ejercer presión sobre los senos maxilares, la cavidad más grande, lo que provoca que estos presionen con mucha fuerza los dientes molares superiores, empujando sus raíces.
Por este motivo, es frecuente que cuando tienes un episodio de alergia, sientas mayor dolor y sensibilidad a los cambios de temperatura repentinos. Si la alergia termina y el dolor persiste, deberás asistir al dentista para evaluar si se trata de algo grave.
Sequedad bucal
Las alergias pueden producir con mucha frecuencia sequedad bucal y esto ocurre debido a las siguientes causas:
- En principio, tener que respirar por la boca cuando tu nariz está tapada contribuye a secar la boca.
- Muchos medicamentos que recetan para la alergia suelen provocar la sequedad bucal como uno de sus efectos secundarios.
Sea cual sea el motivo, lo importante es que la ausencia de saliva provoca el desarrollo de múltiples caries o mal aliento, entre otras afecciones bucales, ya que una de sus funciones es la de eliminar bacterias nocivas.
Dolor de garganta
El goteo nasal posterior que se produce de la nariz a la garganta de modo interno, producto de las alergias, puede en un punto generar irritación en la garganta hasta llegar a originar dolor. Algo que a su vez puede derivar en la aparición de mal aliento. Al tratarse de un fenómeno producido en la garganta, un cepillado de dientes no será efectivo y podrían producirse caries en menos tiempo de lo que esperas.
Ataques de asma
Estos ataques pueden producirse debido a cambios bruscos de clima, y deben ser tratados inmediatamente, ya que generan problemas graves en el aparato respiratorio pero, de un modo a otro, también en la dentadura.
Si sufres de un ataque de asma, debes usar tu inhalador. Normalmente quien tiene estos episodios omite las comidas por el malestar ocasionado y no halla la necesidad de lavarse los dientes, por lo que las bacterias se pueden alojar en las piezas y crear caries.
Trata tus alergias
Ciertamente la salud bucal depende de muchos factores externos, por eso te recomendamos que si padeces de alergias con mucha frecuencia acudas al especialista, porque mientras más veces recaigas en episodios alérgicos mayores son las probabilidades de desarrollar alguna enfermedad o problema en los dientes.
¿Qué hacer para evitar las consecuencias de la alergia?
Toma mucha agua
Para mantener la boca en buen estado, es recomendable mantenerse bien hidratado para expulsar del cuerpo todo el exceso de moco que se aloja en los senos paranasales y los pulmones. Mientras más lubricada esté la boca, mejor, ya que se produce saliva y es la única que puede protegernos de bacterias malignas que se alojan en los dientes y provocan caries u otras enfermedades que atentan contra tu salud bucal.
Gárgaras de agua salada
Además, te aconsejamos realizar gárgaras con agua tibia y sal, pues ayuda a eliminar moco y bacterias alojadas en la garganta, principales responsables de las infecciones del tracto intestinal, la amigdalitis y el mal aliento.
Paralelamente hay que aumentar la eficacia a la hora del cepillado y el uso de hilo dental. Mientras mejor sea el cepillado, mayores probabilidades tendremos de no generar caries o alguna enfermedad dentaria.
Si tras salir de la alergia aún persisten los malestares en los dientes, lo ideal es asistir al especialista quien hará la evaluación adecuada para llegar a un diagnóstico y recetar el tratamiento adecuado.
Evita tomar exceso de antialérgicos
Tampoco puedes dejar a un lado que el consumo excesivo de antihistamínicos causa vómitos, náuseas y sequedad, motivos por los cuales la salud de tu boca sufrirá afecciones constantes en caso de que no regules la toma de estos medicamentos.
Descubre qué te causa alergia
Realmente las causas de las alergias son muy variadas. Van desde consumir determinadas frutas, vegetales y mariscos, hasta acercarse al polvo o ambientes con temperaturas cambiantes. Independientemente de cuál sea el motivo, debes determinar qué te causa malestar. De esta manera sabrás cómo evitar que te ocurra con más frecuencia de lo que esperas.
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