Continuamente nos encontramos expuestos a padecer accidentes que pongan en riesgo nuestra integridad física. Los accidentes dentales también entran dentro de la lista de riesgos, ya que son múltiples los motivos por los cuales se pueden producir heridas o lesiones en el interior de la cavidad bucal.

Las heridas producidas por cortadas pueden ser o no ser peligrosas dependiendo de la gravedad y del origen de las mismas. Pueden ocurrir como consecuencia de un accidente dental en la consulta con el dentista o por un sin número de causas externas.

Conocer los riesgos a los que estás expuesto al sufrir una cortada en tu boca así como los principales pasos a seguir en caso de que esto ocurra, es importante para prevenir un costo más elevado si esta clase de accidentes o incidentes llegan a suceder.

Cómo puede sufrirse una cortada en la boca

Son muchas las maneras por las cuales se puede sufrir una lesión o cortada en la boca. La gravedad así como los cuidados van a venir determinados por el origen de la lesión. Dentro de las causas principales que producen lesiones en la cavidad bucal se destacan las siguientes:

• Accidentes dentales en la consulta con el Odontólogo: el dentista utiliza en su trabajo cotidiano una serie de instrumentos y materiales para realizar las determinaciones y procedimientos bucales en sus pacientes.
  Dichos instrumentos pueden producir lesiones en la cavidad bucal del paciente producto de un movimiento inesperado o brusco bien sea del paciente o del Odontólogo, así por ejemplo pueden producirse cortes entre pequeños y mayores con la fresa (“taladro”) tijeras o con el bisturí, entre otras causas.
• Laceración de la mucosa bucal con los alambres o bandas de los aparatos de ortodoncia: por una mala acomodación de los alambres y ligas de los brackets al momento de colocarlos, así como cuando se aflojan estos aparatos de ortodoncia, se puede producir irritación de las paredes internas de la cavidad bucal provocando magulladuras, laceraciones o lesiones de distinto grado en diversas áreas de la boca como las encías, las mejillas y el paladar. 

• Introducción de cuerpos u objetos extraños al interior de la cavidad bucal: al ingresar lápices, tenedores, cuchillos, palillos o cualquier infinidad de objetos en tu boca, corres el riesgo de producirte una herida o cortada por algún mal movimiento o por ejercer mayor presión de la tolerada.

• Masticar ciertos alimentos: muchas veces te produces cortadas con el simple hecho de ingerir y masticar ciertos alimentos más duros de lo normal o que posean salientes o puntas afiladas que puedan clavarse en las encías.

Peligrosidad o gravedad de las lesiones

Las lesiones tienden a ser más graves dependiendo del objeto con el cual se hayan producido. Por ejemplo, si estás en el consultorio de tu dentista y por un mal movimiento este introduce una jeringa y te pincha de manera brusca con la aguja, el riesgo de padecer una herida peligrosa no es tan elevado como que el objeto que produzca la lesión sea un cuchillo o un clavo oxidado.

La profundidad de las cortadas es un criterio a considerar para determinar la gravedad de las lesiones. Esto se ve reflejado en la cantidad de sangre que se pierde y el tiempo o métodos que sean necesarios emplear para detener dicho flujo de sangre.

También es necesario considerar las probabilidades que existen de que el objeto con el cual se haya sufrido la cortada se encuentre contaminado por cualquier agente infeccioso. De ser así, el riesgo de desarrollar una infección a partir de este evento es elevado por lo cual se incrementan los niveles de peligrosidad.

Pasos a seguir al momento de sufrir una cortada en la cavidad bucal

Si por algún motivo se produce una cortada en tu boca, lo más importante es mantener la calma y buscar la manera de pedir ayuda o acudir a un odontólogo para que realice las evaluaciones correspondientes.

Sin embargo, no siempre se puede esperar a acudir a un consultorio odontológico y obtener una respuesta de parte del dentista. Muchas veces es necesario prestar los primeros auxilios antes de la llegada del médico o el traslado del paciente a la consulta de emergencia con el dentista.

En estos casos es menester conocer ciertos pasos simples que puedes llevar a cabo ante la presencia de una cortada en la cavidad bucal que bien puede ser la tuya o la de otra persona. Estos pasos son:

1. Evaluar el tipo de objeto con el cual se produjo la cortada.
2. Revisar si la cortada es o no profunda.
3. Si hay sangramiento leve a moderado se puede enjuagar la boca con agua tibia con sal o solución salina con el fin de detener el sangrado.
4. Si el sangramiento es moderado a profuso se debe ejercer presión sobre la lesión utilizando una gasa estéril, con el fin de facilitar la formación del coágulo de sangre.
5. Si la herida es moderada a grave se debe acudir al odontólogo para su evaluación. En caso de tener una profundidad o tamaño considerable, es posible que se deban realizar puntos de sutura.