Hay una realidad: tu apetito no cambia cuando tienes brackets pero la dieta sí, es importante evitar consumir alimentos pegajosos, crujientes o duros que interfieren con el tratamiento de ortodoncia, en muchos casos ajustar los hábitos alimenticios representa un gran reto; pero no es imposible y sí muy benéfico.

Podríamos decir que los cambios en la dieta son una de las desventajas de tener ortodoncia, pero la idea no es hacer cambios drásticos sino inteligentes y simples para disfrutar de los alimentos que amas mientras avanza tu tratamiento ortodóntico.

Si quieres saber más sobre este tema no te pierdas los siguientes consejos de alimentación para pacientes con brackets:

1. Mantén una dieta equilibrada

La nutrición juega un papel importante durante el proceso de ortodoncia porque cuanto más sanos sean tus dientes y tejidos orales, mejor responderán estos al tratamiento, además al combinar la dieta con una buena higiene bucal y visitas regulares podrás mantener tu sonrisa sana y lo suficientemente fuerte para obtener excelentes resultados.

Lo mejor es consumir muchas frutas, verduras y vegetales fibrosos con vitaminas y minerales evitando excesos de azúcar, pocas personas saben que las deficiencias de vitaminas pueden manifestarse en los dientes, el tejido de las encías, labios, mejillas y lengua por lo tanto mantener una dieta equilibrada es una forma de tener energía, combustible para tu cuerpo y mantener una sonrisa sana.

Un dato importante es que debes limitar la ingesta de bebidas azucaradas, energizantes y ácidas porque promueven niveles de pH bajos en la boca apoyando la formación de caries dentales y enfermedades en las encías que podrían complicar tu tratamiento de ortodoncia.

La idea no es que consumas sólo alimentos blandos con poco valor nutricional porque recibirías bajas concentraciones de nutrientes afectando tu salud en general, la idea es alejarse de los alimentos pegajosos y duros que podrían cambiar la presión de los alambres e incluso desprender los soportes.

2. Evita las carnes duras y fibrosas

Comer proteínas y hierro es sumamente importante para tu salud, pero si tienes brackets los cortes gruesos de carne no son ideales para ti porque son fibrosos, duros y ásperos generando dolor dental al impactar con el equipo de ortodoncia.

Por otro lado, morder una deliciosa costilla o unas alitas de pollo crujientes es la forma ideal de despegar los soportes y alambres de los brackets requiriendo atención dental que se traduce en tiempo y dinero desperdiciado, ciertamente la ortodoncia es fuerte pero tiene sus límites y por tu bien lo mejor es que elijas cortes de carne tiernos, pescado, pechugas de pollo, salchichas o cerdo picado, si eres vegetariano las mejores opciones son tofu, mantequilla de almendras o maní.

3. Mastica chicle sin azúcar

Históricamente el chicle ha sido rechazado en el mundo de la ortodoncia, pero sin embargo al masticar cautelosamente variedades de este producto sin azúcar estimulamos el flujo sanguíneo alrededor de las encías que a su vez ayuda a disminuir el dolor e inflamación originada por los brackets.

Sólo debes proteger los aparatos masticando lentamente el chicle con los molares posteriores, además favorece la producción de saliva que enjuaga la placa bacteriana y ácidos persistentes, fortalece el esmalte dental y ayuda a crear un pH saludable en la cavidad oral.

4. Consume suficientes productos lácteos

Desde pequeños hemos escuchado que la leche nos ayuda a tener huesos y dientes fuertes, pero es posible encontrar estos beneficios abarcando la salud oral en todos los productos lácteos desde quesos hasta yogurt, y como los dientes sanos ayudan a mantener el tratamiento de ortodoncia la mayoría de expertos recomiendan a los pacientes mayores de 8 años comer 3 tazas de lácteos al día.

El calcio, la vitamina D y potasio que se encuentran en alimentos como el yogur, leche y el queso nos ayudan a mantener una buena salud dental sin importar nuestra edad, estas vitaminas y minerales esenciales fortalecen los dientes, neutralizan los ácidos dañinos en la boca e inhiben las caries dentales, además convenientemente los productos lácteos en su mayoría son suaves y amistosos con los brackets.

5. ¡No dejes a un lado las frutas!

Estas son una parte esencial y deliciosa dentro de la dieta, además de ser ricas en vitaminas y minerales para nuestro cuerpo en todos los sentidos. Un estudio realizado recientemente en U.S.A señaló que los ácidos ascórbicos encontrados en frutas como las naranjas, kiwi y las fresas son capaces de apoyar la sanación de los tejidos orales durante el tratamiento ortodóntico, en pocas palabras facilitan el proceso de alineación dental de forma indirecta.

La mayoría de las frutas son suaves y se consumen fácilmente con ortodoncia como por ejemplo: las fresas, arándanos y frambuesas, sin embargo algunas frutas crujientes deben consumirse con cuidado como las manzanas y peras verdes ya que son capaces de aflojar los soportes con una sola mordida, tampoco dejes de consumirlas sólo debes cortarlas en pedazos pequeños y masticarlas con los molares posteriores.

6. ¿Demasiado crujiente? Entonces caliéntalo.

Las verduras crujientes representan una amenaza importante para los brackets, pero este grupo de alimentos es esencial y puede consumirse adaptando su cocción al vapor como por ejemplo: el brócoli, zanahorias, calabacín y pimentones.

También te recomendamos suavizar los panes que tienen costras duras en el microondas o desmenuzarlos en trozos pequeños, esta misma regla se aplica para todos los alimentos que son duros y podrían desprender los soportes.