Comprar lentes económicos en línea (online o vía internet), en la calle, quioscos de centros comerciales o tiendas en rebajas es muy tentador pero la realidad es que estos productos rara vez están a la altura de nuestras expectativas, incluso podrían dañar tus  ojos sin ni siquiera ser conscientes de ello, a continuación conocerás 7 cosas que debes tomar en cuenta al considerar comprar lentes de fórmula o contra el sol extremadamente baratos:

1. ¿Qué se sacrifica para ofrecer precios bajos?

Los vendedores en línea tienden a decir que los lentes son económicos porque no manejan los mismos gastos que tiendas grandes como por ejemplo: facturas de luz, alquiler y aseo, pero lo que no dicen es que estas cifras vienen de un costo oculto asociado a no tener una atención personalizada, la atención y experiencia de un optometrista calificado y la opción de probar diferentes marcos en tu rostro.

Por el contrario te encuentras seleccionando marcos al azar con la esperanza que se adapten a tu estilo de vida y además se vean bien.

2. “Tiene la misma calidad que el original”

Muchos de los distribuidores de lentes de sol y fórmula online son rápidos en afirmar que su producto tiene la misma calidad que cualquier óptica profesional, pero ¿Cómo determinan esto? La realidad es que existen diferencias significativas en cuanto al revestimiento que evita ralladuras, niveles de rendimiento óptico, durabilidad y confort entre diferentes materiales.

Además muchos minoristas en línea venden lentes graduados que fabrican en sus propios laboratorios caseros en lugar de utilizar un laboratorio óptico profesional que se especializa en proporcionar este servicio, ciertamente este hecho disminuye considerablemente los costos pero también la calidad del producto final que tendrás en tus manos.

3. ¿Más variedad es igual a mejor?

Los minoristas señalan que las tiendas ópticas no son capaces de igualar su vasto inventario y aunque esto sea verdad: ¿Cuántos de estos marcos tienen un buen ajuste para tu cara? Y ¿Quién te ayudará a elegir? Estas simples preguntas marcan la diferencia.

4. No confíes en las pruebas virtuales o caseras

Muchas tiendas online de lentes tienen acceso a pruebas virtuales donde cargas una foto tuya de frente y superpones imágenes de diferentes marcos en tu cara para ver como luces, aunque suena genial este intento virtual te dará sólo una idea aproximada de cómo te verás pero no tendrás referencia en cuanto a sensación y detalles.

Por otro lado, independientemente de la calidad de la herramienta virtual es posible que el tamaño de los lentes no sea exacto, y no es raro que el color real se vea notablemente diferente al que muestra el sitio web, incluso si un minorista en línea te envía muestras de un marco hasta tu casa para que lo pruebes antes de la compra final no sabrás si al incluir la fórmula sea demasiado pesado o grueso para ti, esto es especialmente importante si eres sensible al peso de los lentes porque tienes sinusitis o piel muy delicada.

5. Los lentes de sol baratos podrían hacerte daño

Los lentes de sol de calidad son casi idénticos a los que encontramos en tiendas online a bajos precios, incluso parecen proporcionar la misma protección solar pero el color oscuro del lente no es indicador de lo bien que protege tus ojos contra los rayos UV, la única forma de tener seguridad es preguntándole a un optometrista.

Los lentes de sol baratos etiquetados como “polarizados” o “100% protección UV” a menudo permiten que los rayos UV y luz azul penetren a los ojos causando daños potenciales con el tiempo, si quieres saber que marcas son confiables en cuanto a protección UV, transmisión de luz visible y sobre todo que se ajusten a tus necesidades visuales debes consultar antes con tu oftalmólogo.

6. Los lentes de lectura sin prescripción causan fatiga visual

Es verdad que los lentes para lectura que encontramos en supermercados ayudan a ver mejor de cerca si tienes más de 40 años de edad, o en caso que hayas experimentando problemas visuales relacionados con la presbicia, pero es fácil elegir el ajuste equivocado cuando tú mismo compras lentes como si fueran dulces.

La calidad óptica nunca es igual al comprar lentes personalizados según tus necesidades visuales, por otro lado al elegir un ajuste incorrecto aumentamos el riesgo de sufrir fatiga visual y no estar protegidos contra la luz azul de alta energía emitida por los dispositivos digitales.

7. Los marcos baratos generan irritación en la piel

A primera vista algunos marcos de anteojos baratos parecen elegantes, finos y costosos, pero en su mayoría están elaborados con materiales de baja calidad que podrían causar irritación en la piel con el tiempo, además los marcos de plástico por lo general pierden su color con los rayos UV y el acabado cambia su textura después de unos meses de desgaste.

Lo peor del caso es que los marcos de metal de baja calidad contienen aleaciones de níquel que generan irritación y manchas en la piel, incluso algunos tienen pintura de plomo u otras sustancias toxicas que son han sido aprobadas en los entes de sanidad mexicanos.