¿Beber café es una odisea?, ¿Al comer helados sientes dolor?, ¿Piensas dos veces antes de consumir cualquier alimento? Si la respuesta fue “Si” a alguna de las preguntas anteriores lo más probable es que tengas una condición denominada sensibilidad dental.

No tienes porque experimentar esta molestia toda tu vida, existen soluciones viables para disminuir la sensibilidad y mejorar la salud dental comprobadas científicamente. Antes de hablar de tratamientos debemos saber ¿Cuáles son las causas? A continuación te dejamos algunas opciones a tomar en cuenta:

• ¡Te cepillas los dientes con demasiada fuerza!
  A veces la sensibilidad aparece al utilizar cepillos con cerdas rígidas o ser excesivamente bruscos a la hora de asear los dientes, con el tiempo esta práctica desgasta las capas protectoras exponiendo a la dentina y los túbulos huecos que conducen a los nervios dentales, estos últimos cuando se exponen a alimentos calientes, fríos, ácidos o pegajosos dan paso a molestias recurrentes con sensaciones de pinchazos, la solución más simple es cambiar a un cepillo con cerdas medianas y mejorar la técnica de cepillado.
• Consumes en exceso alimentos ácidos
  Si todos los días ingieres limón, salsa de tomate, kiwi, piña, encurtidos, naranjas y otros alimentos ácidos, lo más probable es que desgastes las últimas capas de las piezas dentales, hasta que llegue el momento que al tomar una limonada sentirás dolores punzantes y te preguntarás ¿Por qué? Para evitarlo, sólo debes mantener una alimentación balanceada.
• Aplicar blanqueamientos dentales constantemente
  Cuando utilizamos pastas dentales, líquidos y tiras blanqueadoras en forma desmedida se desgasta el esmalte dental, a pesar que es una de las estructuras más fuertes del cuerpo humano, al mismo tiempo se expone la dentina llegando en el peor de los casos a exponer los nervios. Lo mejor es consultar con tu dentista que productos usar según tus necesidades para no empeorar la situación sin necesidad.
• Usar enjuagues dentales sin receta
  Algunos de estos productos contienen altas concentraciones de alcohol y otros químicos haciendo que los dientes se vuelvan más sensibles, la solución es comprar un enjuague con fluoruro neutro o mejor aún hablar con tu dentista antes de pensar en comprar cualquier marca.
• Presencia de enfermedad periodontal
  Las encías retractiles son cada vez más comunes con la edad (especialmente si no has mantenido una buena higiene dental), las mismas generan sensibilidad porque exponen la superficie dental. Si la enfermedad de las encías o gingivitis es el problema, tu dentista recomendará un procedimiento para sellar los dientes además de aquel destinado para las encías.
• Acumulación de placa dental
  El propósito de usar hilo dental y cepillarse los dientes es quitar la placa que se forma después de comer, cuando esta se queda en las piezas dentales desgasta el esmalte, además de inducir la aparición de caries dentales.

Una vez que los dientes son más sensibles por perder su protección natural, la solución es practicar un buen cuidado dental diario y visitar al odontólogo para limpiezas profesionales cada seis meses o más frecuentes de ser necesario.

• Procedimientos dentales recientes
  Los dientes a menudo se vuelven más sensibles después de haber sido sometidos a procedimientos en la silla del dentista como por ejemplo un tratamiento de conductos (Endodoncia), extracción de las muelas del juicio o la colocación de una corona. Si la sensibilidad no desaparece después de unos días lo mejor es consultarlo con el dentista ya que podría tratarse de un problema mayor.
• Dientes agrietados
  Un diente astillado por lo general causa dolor que va más allá de la sensibilidad dental, en este caso es primordial que el dentista evalué y decida el curso correcto del tratamiento.
• Decadencia alrededor de los bordes dentales: A medida que envejecemos los empastes suelen debilitarse, fracturarse o filtrarse alrededor de los bordes, en este caso es fácil para las bacterias acumularse en estas pequeñas grietas, provocando la acumulación de ácido y ruptura del esmalte, en la mayoría de los casos los rellenos se reemplazan fácilmente.

¡No te preocupes! La sensibilidad dental es totalmente tratable, de hecho en algunos casos con solo usar pastas dentales especiales se consiguen resultados asombrosos, pero cuando la condición es extrema y persiste en el tiempo es necesario recurrir a otros tratamientos un poca más invasivos, una de ellas es la aplicación de gel con fluoruro en las áreas donde tienes mayor sensibilidad buscando fortalecer el esmalte dental y reducir las sensaciones que presentas.

Lo único que es igual para todos, es que debemos agendar una cita con el odontólogo, ya que es el único que determina de forma profesional la causa real y tratamiento adaptado a tus necesidades.